Hablar inglés: qué tan importante es para conseguir trabajo en Colombia | Empleo | Economía

Durante los últimos años, el contexto geopolítico, tecnológico, educativo y social; en todo el mundo, ha llevado a que las exigencias y necesidades del mercado laboral sean distintas, pasando de cargos netamente funcionales y operativos décadas atrás, a la búsqueda de perfiles más estratégicos y dirigenciales, que ayuden a impulsar la transición hacia un escenario digital, globalizado e hiperconectado.

Precisamente estos últimos conceptos (globalización y conexión), han abierto paso a que no baste con leer y escribir únicamente en la lengua nativa, sino que se recurra a profesionales políglotas o que por lo menos dominen una segunda lengua, preferiblemente el inglés, convirtiéndose esto en un punto diferencial en el mercado.

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Si bien en el caso de Colombia hasta hace algunos años esto no era un tema relevante, fenómenos como el teletrabajo, la llegada de los call center y las apuestas del país por convertirse en un referente de mano de obra calificada en el mundo tecnológico, llevaron a que cada vez sea más necesario hablar este idioma.

Necesidades crecientes

El Centro de Estudios Económicos Anif, presentó esta semana un análisis que advierte que el dominio de la segunda lengua ha tomado relevancia en el mercado laboral colombiano, bajo un contexto con todas las características ya mencionadas y que si bien no es tan alto como se esperaba, cobra más fuerza conforme pasan los años.

“El proceso de búsqueda de empleo se enmarca en un modelo de intermediación laboral con información imperfecta. Esto quiere decir que los empleadores y los trabajadores buscando empleo no siempre tienen la misma cantidad de información, lo que puede llevar a desafíos importantes a la hora de contratar personas, o de aceptar trabajos que no cumplen las expectativas”, arrancaron contando.

Si bien esto no es malo a primera vista, para Anif plantea ciertos desafíos, ya que estas situaciones llevan a un desajuste entre la oferta y la demanda de trabajo, porque los empleadores pueden no estar completamente informados sobre la disponibilidad de candidatos con las habilidades necesarias, y los trabajadores pueden no conocer todas las oportunidades laborales que se adecúan a sus competencias.

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“El requisito del inglés podría responder a la creciente disponibilidad de información en la web en idiomas distintos al español, y a la necesidad de las empresas de interactuar en un entorno global. Tener competencias en esta lengua puede ser un indicador de calidad del trabajador, reflejando su capacidad para acceder a información en otro idioma, manejar tecnologías y herramientas que están predominantemente en ese idioma”, explicaron.

¿Qué tanto se pide?

Con el fin de saber qué tanto están pidiendo las empresas que sus empleados hablen inglés y qué tanto esto se ve reflejado en las ofertas laborales, el Centro de Estudios Económicos revisaron las vacantes publicadas en el Sistema del Servicio Público de Empleo a nivel nacional durante la semana del 19 al 26 de junio e identificó aquellas cuyas descripciones tienen como requisito el conocimiento del idioma inglés.

“Escogimos para este análisis de texto las palabras: inglés (con y sin tilde) bilingüe (con y sin diéresis), idioma y lengua. De las 32.950 vacantes disponibles en ese momento, 1.890, es decir, el 5,74% requerían conocimientos de inglés o algún otro idioma”, señalaron como primera conclusión.

Con esta información y con miras a profundizar en los sectores económicos que más demandan este tipo de habilidades, hicieron una discriminación por empresas y actividades, encontreando que el sector público, las comunicaciones y los servicios administrativos; abarcan más del 60% de las peticiones totales.

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“Las ramas de servicios administrativos y de apoyo, administración pública, y comunicaciones son las que más demandan esta habilidad, con un 28,31%, 28,2% y 18,73% respectivamente. Es lógico encontrar en estas actividades una mayor incidencia de este requisito, porque, como lo mencionamos al principio del comentario, los trabajadores de estos sectores requieren mayores conocimientos en inglés porque tienen una mayor interacción con contextos internacionales”, explicaron.

En este caso también recordaron que estas tres actividades económicas tienen algo en común y es que sus actividades requieren acceder a información o a herramientas de trabajo que funcionan en ese idioma. Con lo cual, con miras a participar de la expansión que está dando el mercado laboral, buscan personas con estas habilidades.

Demanda profesional

Otra de las aristas revisadas fue el nivel educativo a los que se les está pidiendo hablar inglés. Aquí se encontró que la mayoría de las vacantes con este requisito corresponden a posiciones que requieren un nivel universitario (50,58%).

“Así mismo, se destaca una proporción significativa en puestos que requieren educación media (23,70%). Sin embargo, encontramos que el requisito de inglés no está estrechamente correlacionado con el rango salarial”, informaron.

Para Anif, los datos presentados subrayan la importancia de fomentar el aprendizaje del inglés como una herramienta clave para mejorar la empleabilidad y la competitividad en el mercado laboral colombiano, y en especial, en algunos sectores de la economía, preparándose así para un entorno cada vez más interconectado y globalizado.

Apostar por la capacitación

Luz Magdalena Salas, vicepresidenta de Anif, es uno de los personajes que más ha incidido desde Anif para prestar atención a este tipo de informes, alegando que los jóvenes serán quienes tomen el timonel del país en los próximos años y por tanto deben prepararse para los desafíos que se están viendo en el panorama.

“Si nosotros logramos identificar cuáles son las necesidades que tiene el mercado laboral en distintas áreas, podemos orientar la capacitación o la formación de nuestros jóvenes en esas áreas específicas que los lleve uno a acceder a trabajos estables y a insertarse en este escenario de una forma más rápida y relevante. Si nosotros comprendemos cuáles son las capacidades, cuáles son las necesidades, podemos actuar mejor”, manifestó.

Esta experta agregó que “una de las cosas que hemos dicho nosotros y que sucede en particular con los jóvenes, pero también sucede con personas de otras edades, es que encontrar trabajo en actividades para las cuales están preparados cada vez está siendo más difícil. Es decir, hay un desajuste entre lo que necesita el sector productivo y entre lo que tienen los jóvenes y los trabajadores para ofrecer”.

Dicho esto y con las cifras del mercado laboral como referencia, Salas sostiene que acá el país tiene un frente de trabajo sobre el que puede empezar a generar proyectos y estrategias de formación, entendiendo que hay que estar a la vanguardia.