El pasado miércoles 14 de diciembre se llevaron a cabo las últimas pruebas para el funcionamiento de Hidroituango. Entre ellas, una serie de evacuaciones preventivas en cuatro poblaciones con un balance positivo.
Horas después, la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo publicó una serie de alertas sobre los riesgos de la central: la estabilidad de su macizo rocoso. De acuerdo con Javier Pava, director de la UNGR, dos estudios, uno del Servicio Geológico Colombiano y otro del geólogo Modesto Portilla, muestran que no hay certeza sobre el comportamiento de la hidroeléctrica tras entrar en operación.
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Por eso, hizo un llamado a que se le dio prioridad a la precaución. «El comportamiento que va presentar el macizo rocoso no puede ser solo afectado en el momento de entrada en operación, sino no sabemos cuál va ser la respuesta que presente el macizo rocoso durante meses o continuidad de este tipo de aspectos que podría en cualquier momento cambiar porque las condiciones de acuerdo con los informes tanto del Servicio Geológico como de Modesto Portilla indican que hay unos graves problemas de inestabilidad«, aseguró Pava.
El funcionario también manifestó que la UNGRD le solicitó al Servicio Geológico Colombiano (SGC) una inspección en el proyecto. El estudio arrojó que se identificaron problemas de inestabilidad en la presa y dificultades de erosión en las áreas subterráneas, porque lo que recomendó realizar una serie de estudios adicionales para confirmar las condiciones de estabilidad del macizo.
En otro informe un experto advirtió sobre lo que podría suceder ante la inestabilidad del macizo rocoso y las graves consecuencias que generarían su colapso.
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“Estos dos informes los hemos considerado en el análisis de riesgos que realizamos, generándonos una grave preocupación y la advertencia a los responsables frente a la puesta en operación del proyecto. Creemos que es irresponsable adelantarlo y ponerlo en marcha sin tener la seguridad y la tranquilidad que debemos ofrecerles a los ciudadanos que están aguas abajo del embalse”, añadió Pava.
Equipo de trabajo de EPM tras la culminación de las pruebas.
EPM
La respuesta de Daniel Quintero
Ante las advertencias, el alcalde de Medellín y presidente de la Junta Directiva de EPM, Daniel Quintero, reiteró, en diálogo con EL TIEMPO, que el proyecto es seguro y que el principal escenario de riesgo que enfrenta actualmente es el uso continuo del vertedero, por donde pasan actualmente las aguas del río Cauca.
Además, aseguró que detrás de las declaraciones de Pava hay intereses políticos que sugieren el desmonte de la presa. «Hay sorpresa por las declaraciones del director de la UNGRD. Han sido erráticas desde que asumió el cargo y también políticas. A mí me gustaría saber si el director tiene el interés de desmontar Hidroituango, siguiendo los deseos de la senadora Isabel Zuleta, que ha hecho su carrera política alrededor de esa idea y saber cuál es la influencia de la senadora en esa entidad«, puntualizó el alcalde de Medellín.
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Asimismo, recordó que diferente entidades y expertos —entre ellos la Procuraduría General de la Nación, la Anla, el board de expertos internacionales y el informe de Poyry— han alertado que la disminución de los riesgos en Hidroituango se da con la puesta en marcha de las unidades de generación y la disminución del paso del agua por el vertedero.
«Nosotros lo que tenemos que hacer es seguir adelante, cumplir la orden de poner a funcionar las cuatro turbinas, bajar la presión por el vertedero, secar el vertedero, arreglar el vertedero y darle tranquilidad a las comunidades aguas abajo», añadió.
Para Quintero, los supuestos intereses políticos en la UNGRD son los que han llevado a pedir evacuaciones, en su concepto, innecesarias, y a mirar cómo se bloquea el proyecto con las nuevas advertencias.
«Yo le pido ser más técnico a la hora de dar informes, porque esto es un tema muy serio y en esto no se puede seguir consideraciones políticas», recalcó Quintero.
PORTAFOLIO
Con información de EL TIEMPO*