El Puerto de Buenaventura se encuentra inmerso en un período de incertidumbre después de que la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) confirmara su decisión de no prorrogar el contrato de concesión del muelle 13. Esta determinación, establecida en una resolución fechada el 14 de marzo, ha generado preocupación entre los actores involucrados en la operación de esta importante infraestructura portuaria.
La ANI basó su decisión en la preocupación por posibles afectaciones ambientales negativas que podrían derivarse de la modificación propuesta por la sociedad Grupo Portuario al contrato de concesión, originalmente establecido en 2005. Aunque inicialmente se había aceptado esta modificación en diciembre de 2023, la entidad revocó su decisión tras identificar errores en el proceso.
El ministro de Transporte, William Camargo, explicó que la primera decisión del Consejo Directivo de la ANI fue tomada de manera asincrónica, y que posteriormente se evidenció la falta de elementos sólidos para respaldarla. A pesar de los argumentos presentados por Grupo Portuario en un recurso de reposición, la ANI mantuvo su postura de no prorrogar el contrato.
Esta situación ha generado preocupación en el sector portuario y económico, con especulaciones sobre posibles demandas millonarias contra el Estado. Sin embargo, el presidente Gustavo Petro ha aclarado que no se trata de retirar el contrato, sino de llegar al final de su vigencia.
Es importante destacar que la Sociedad Portuaria Regional de Buenaventura aclaró que el muelle 13 no forma parte de los bienes que opera, por lo que no se ha visto directamente afectada por esta decisión. No obstante, la información difundida en los medios ha generado inquietud entre los clientes y accionistas.
En este contexto, la operación del muelle 13 continúa a cargo de Ventura Group, mientras que se espera que la ANI y las autoridades competentes brinden claridad sobre el futuro de esta infraestructura y las implicaciones de su decisión en el desarrollo del Puerto de Buenaventura.