Tomado de bluradio.com
Tras más de 12 años de espera y la supuesta negligencia de funcionarios de Confamiliar Nariño, indígenas del resguardo de Guachucal se tomaron pacíficamente las oficinas de esa entidad en pleno centro de Pasto, para impedir que se pierdan más de 20 mil millones de pesos destinados a un programa de vivienda en ese municipio del sur del departamento.
Los indígenas dicen que por culpa de la caja de compensación familiar de Nariño, un total de 200 familias de escasos recursos económicos están a punto de perder el sueño de tener una vivienda digna. Manifestaron que se quedarán el tiempo que sea necesario hasta que Confamiliar Nariño explique por qué no han comenzado las obras.
Uno de los representantes de los indígenas dijo a Blu Radio que han citado en 20 oportunidades al director de Confamiliar Nariño, pero que la respuesta ha sido negativa y, por eso, tuvieron que tomar las vías de hecho para que sus peticiones sean escuchadas.
Llegaron desde muy temprano a la sede de la caja de compensación familiar localizada en pleno centro de la ciudad y dicen que desde hace ocho meses están esperando una respuesta de las directivas. Exigen que la parte del contrato que fue adjudicado a Confamiliar Nariño sea entregada a otra entidad porque se logró establecer que esta entidad no tiene el músculo financiero para cumplir con la obra.
Los indígenas llegaron con pancartas en donde se podía leer claramente que exigen respeto por sus derechos y que ya no quieren más dilataciones. Según los plazos estipulados por el Ministerio de Vivienda y Agua Potable, el proyecto de construcción de 200 viviendas está a punto de expirar, lo cual conlleva a que se podrían perder cerca de 20 mil millones de pesos destinados para tal fin por el gobierno nacional.
Los indígenas, visiblemente indignados, aseguran que ya no aguantan más y exigen que Confamiliar Nariño entregue el contrato. Hicieron un resumen de la situación que hoy están atravesando, ya que aseguran que ya no tienen cómo pagar el arriendo de las casas donde están viviendo en ese municipio del sur de Nariño.
En un comunicado emitido por los pueblos indígenas del resguardo de Guachucal, las familias afectadas aseguran que ven, “con gran preocupación que, a la fecha límite de acuerdo con los requerimientos del contratante Fiduciaria Bogotá y MinVivienda, no se haya definido si como contratista oficial, que es la unión temporal Techos Colombia, con representación legal de Confamiliar Nariño (director Sergio Suárez Nieves), se ejecutarán las obras o, en su defecto, encargará a un tercero o cesionario para que ejecute el proyecto en mención”.
Por eso, concluyeron la comunicación denunciando ante la opinión pública “que existe, de parte de Comfamiliar Nariño, una clara violación de los derechos fundamentales a una vivienda digna“, lo que “también conlleva obligaciones, entre las que se encuentran un ejercicio conforme al principio de buena fe, lo cual implica actuar con honestidad, lealtad y rectitud; observar los mandamientos constitucionales y legales que regulan la atención a las familias en estado de alta vulnerabilidad y utilizar los mecanismos y canales legales instituidos para el acceso a la vivienda” y terminaron solicitando que, “de manera inmediata, haya un pronunciamiento del director de Comfamiliar Nariño”.
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