Redacción
El dato de inflación de julio que entregó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) en la noche del jueves sorprendió al mercado, pues no solo se presentó una cifra muy por encima de las expectativas en la variación del IPC mensual, que fue de 0,32% cuando los analistas esperaban cerca de 0,04%, sino que se llevó al alza al indicador anual, que se situó en 3,97%, muy cerca del techo de 4% que se ha trazado el Banco de República y el Gobierno.
(Inflación anual en Colombia se ubicó en julio cerca al 4%).
Con este indicador, la expectativa para el cierre del año ya comenzó a verse altamente afectada, y eventualmente, según los analistas, comenzará a materializarse en los bolsillos de los consumidores y la economía nacional.
“Que la inflación esté por encima del rango meta del Emisor quiere decir que los precios, en promedio, se están ajustando a un nivel que afecta el ingreso disponible de las familias, es decir, lo que nos entra alcanza cada vez para menos, porque normalmente los salarios se ajustan un poco en vía a la inflación esperada”, explicó el economista principal de Scotiabank Colpatria, Sergio Olarte, quien aclaró además que las familias más afectadas resultan ser entonces las de menores ingresos.
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El experto hizo hincapié en que los alimentos son la canasta que más pesa en el cálculo de la inflación y dijo que “todavía estamos viendo cuellos de botella en estos, precios altos en los valores del pollo y el huevo que debido a los bloqueos y los paros no se han normalizado”.
Olarte aseguró que buena parte del efecto de la inflación es temporal, por lo que el mercado se mantiene “tranquilo”, pero que se hace necesario continuar monitoreando el indicador. Juan David Ballén, director de Análisis y Estrategia de la comisionista Casa de Bolsa, enfatizó en que “hay que diferenciar entre nivel de precios y la variación anual, porque los precios están por debajo de los de hace un año, algunos componentes van a volver a sus niveles prepandemia, pero otros lo van a superar. Y no es lo mejor, porque muchas personas se han quedado sin empleo y han visto deterioros en los ingresos. Lo que más ha explicado la inflación son los alimentos, y ese es el componente más importante para estratos bajos”.
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De hecho, Ballén consideró que una inflación cercana al 4% para el cierre del año que ya se esperaba, pero que algo que destaca es que los incrementos en precios se vienen dando en sectores que se habían visto afectados por la pandemia, como comidas fuera del hogar y diversión y entretenimiento, entre otros.
“Esto es un síntoma de que la economía se está reactivando. En cierta medida es un motivo positivo, pero lo que vamos a ver en un principio es que los precios de estos grupos lleguen a niveles prepandemia”, dijo el analista de Casa de Bolsa.
Finalmente, María Paula Castañeda, economista de BBVA Research para Colombia, destacó cómo la inflación en julio sorprendió por tercer mes consecutivo al alza y se refirió para el resto del año el indicador continuará enfrentando presiones alcistas por cuenta de diferentes factores.
“Por un lado veremos cómo se transmite la reciente devaluación del tipo de cambio sobre los precios de otros rubros de la canasta donde suele verse con algún rezago. En esta misma línea veríamos efectos adicionales de los precios internacionales de las materias primas sobre la estructura de costos de los bienes y servicios locales”, aseguró la economista.
Castañeda comentó también que la inflación se mantendría alta en lo que resta del año y cerraría el mismo por encima del rango esperado por el Banco de la República.
EFECTO POR CLASE SOCIAL
Desde el Dane se analizaron las percepciones de inflación que tienen los hogares según sus niveles de ingresos.
De acuerdo con la entidad, en aquellos catalogados como vulnerables, la inflación anual se percibe, con relación a su nivel de gasto, en 4,68%, mientras que en los hogares pobres sería de 4,48%, en los de clase media 4,18% y en los de ingresos altos la inflación percibida sería de 3,01%.
Esto se explica, según el director de la entidad, Juan Daniel Oviedo, “debido a que la mitad del comportamiento inflacionario del mes (julio) está explicado por los rubros de alimentos, arriendo y servicios públicos, que pesan menos en los hogares de
estrato alto”.
Laura Lucía Becerra Elejalde
