Las regiones más afectadas son Chattogram y Sylhet, donde los principales ríos “fluyen muy por encima de los niveles peligrosos”, lo que agrava aún más la situación. de acuerdo a al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Las estimaciones iniciales sugieren que alrededor de cinco millones de personas, incluidos dos millones de niños, se han visto afectadas, muchas de ellas desamparadas sin alimentos ni ayuda.
Hasta el martes se han reportado veinte muertes y otras 285.000 han buscado refugio en más de 3.500 refugios, añadió UNICEF.
También se han registrado daños masivos en carreteras, tierras de cultivo y pesquerías, lo que ha afectado gravemente a los medios de vida.
Las operaciones de búsqueda y rescate dirigidas por el gobierno están en curso, y algunas zonas son inaccesibles.
Los socios de la ONU en algunos lugares han informado que no se espera que los niveles de agua bajen hasta dentro de al menos una semana, con el riesgo de anegamientos persistentes y la consiguiente amenaza de enfermedades transmitidas por el agua y por vectores.
Lluvias extraordinarias en el este de la India
El estado de Tripura, en el este de la India, se vio afectado por lluvias extraordinarias durante más de 72 horas hace aproximadamente diez días, lo que provocó algunas de las inundaciones más graves desde 1983, según los medios locales.
Las lluvias, junto con los más de 2.000 deslizamientos de tierra resultantes, afectaron supuestamente a 1,7 millones de personas, incluidas alrededor de 117.000 que han sido desplazadas a campos de ayuda establecidos por las autoridades del distrito.
Se dice que unas 26 personas han sido asesinadas, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCAH) dichocitando funcionarios.
Se está llevando a cabo una respuesta encabezada por el Gobierno, y se dice que los niveles de las inundaciones han estado disminuyendo.
También se registraron múltiples deslizamientos de tierra en el estado norteño de Himanchal Pradesh desde finales de julio, lo que provocó varias víctimas.
Impactos del cambio climático en Nepal
La temporada de monzones también causó estragos en Nepal, un país que se encuentra en la primera línea del cambio climático, donde experimentó un clima más errático e intenso y un rápido calentamiento de los glaciares, lo que provocó graves inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra.
Una inundación de un lago glacial (GLOF) en la región del Everest del país arrasó con el pueblo de Thame, situado a una altitud de unos 3.800 metros (12.500 pies) y popular entre los excursionistas.
Aunque no se reportaron muertes ni heridos graves, más de una docena de casas y pequeños hoteles, una escuela y una clínica de salud fueron arrasadas.
Sin embargo, en otras partes del país, la temporada de monzones de 2024 provocó más de 200 muertes, incluida la capital, Katmandú.
En un incidente particularmente trágico, unas 65 personas murieron cuando dos autobuses fueron empujados a un río crecido el mes pasado. Las autoridades han podido recuperar los restos de sólo tres personas, y las labores de búsqueda continúan.
La respuesta continúa en Pakistán
En Pakistán, los desastres se cobraron la vida de 243 personas desde julio, aproximadamente la mitad de ellos niños, lo que subraya su mayor vulnerabilidad, OCHA reportado.
Las inundaciones también provocaron “daños extensos” a los medios de vida y a la infraestructura vital, incluidas escuelas y puentes.
Las evaluaciones y la respuesta continúan, y los socios humanitarios y las autoridades informan que alimentos, agua potable, suministros médicos y kits de higiene son necesidades clave.