La cirugía de reducción mamaria masculina mejora la calidad de vida de los adolescentes, incluso con complicaciones

El agrandamiento del seno masculino, llamado ginecomastia, puede ser una fuente de vergüenza y angustia para los adolescentes y hombres jóvenes. La cirugía para corregir la ginecomastia brinda una mejora significativa en la autoestima y en casi todos los aspectos de la calidad de vida, informa un estudio en la edición de junio de Cirugía Plástica y Reconstructivala revista médica oficial de la Sociedad Estadounidense de Cirujanos Plásticos (ASPS).

«Nuestra experiencia muestra los beneficios reales físicos, sociales, emocionales y de otro tipo de la corrección quirúrgica para niños y hombres jóvenes con ginecomastia», comenta el cirujano miembro de ASPS Brian I. Labow, MD, del Boston Children’s Hospital, autor principal del nuevo estudio. «También mostramos que esos beneficios se acumulan a pesar de la tasa relativamente alta de complicaciones menores después de la cirugía de reducción mamaria masculina».

Las complicaciones no limitan los beneficios de la reducción de la ginecomastia

El Dr. Labow y sus colegas analizaron los resultados posoperatorios de 145 pacientes masculinos, de 12 a 21 años de edad, sometidos a cirugía para corregir la ginecomastia. Todos los jóvenes tenían ginecomastia persistente que no mejoraba con la pérdida de peso y la terapia médica. La mayoría tenía sobrepeso u obesidad y tenía una ginecomastia más grave (grado III o IV).

Se realizó reparación quirúrgica en un total de 270 mamas; algunas pacientes requirieron corrección en una sola mama. Los investigadores analizaron los efectos de la corrección de la ginecomastia en la calidad de vida, incluido el posible impacto de las complicaciones posoperatorias.

Las complicaciones tempranas ocurrieron en alrededor del 10% de los senos. Esto incluyó una tasa del 7,8 % de hematomas (colecciones de sangre), la mayoría de los cuales eran menores; y una tasa de 2,2% de infecciones menores, que se manejaron con antibióticos orales. Otras complicaciones fueron poco frecuentes y no se produjeron complicaciones graves. Los pacientes cuya cirugía incluyó la extirpación de piel tenían 2,5 veces más probabilidades de tener complicaciones tempranas.

El seguimiento posterior (mediana de 8,6 meses) estuvo disponible en 129 pacientes. En ese momento había ocurrido al menos una complicación en el 34,3% de las mamas. Las complicaciones incluyeron tejido residual en el 12,6 % de las mamas e irregularidades del contorno en el 9,2 %. Otras complicaciones (como pezones invertidos y problemas de cicatrización) fueron relativamente raras.

Cincuenta y un pacientes tuvieron un seguimiento más profundo, incluidos cuestionarios preoperatorios y posoperatorios, una mediana de 33,3 meses después de la corrección de la ginecomastia. Los resultados mostraron una mejora significativa en un cuestionario que mide la autoestima: alrededor de 3 puntos más en una escala de 10 a 40.

Los pacientes también mostraron una mejora significativa en 7 de 8 dominios de calidad de vida, incluido el funcionamiento físico, social y emocional, y la salud mental. Una prueba de detección de trastornos alimentarios no encontró cambios significativos en las actitudes hacia la comida y el comer.

Las mejoras en la autoestima y la calidad de vida son similares para los pacientes con o sin complicaciones después de la corrección de la ginecomastia. Los beneficios también aparecen independientemente de la gravedad de la ginecomastia, la técnica quirúrgica o el sobrepeso/obesidad.

En estudios anteriores, el Dr. Labow y sus colegas encontraron que incluso la ginecomastia persistente leve afecta negativamente la autoestima y otros aspectos de la salud mental y emocional en los adolescentes varones. Los nuevos hallazgos se suman a la evidencia que muestra los beneficios para la salud mental y física de la cirugía para corregir la ginecomastia, incluso cuando ocurren complicaciones posoperatorias.

«Estos datos también sugieren que los adolescentes, mientras aún maduran, están debidamente equipados para manejar las complicaciones asociadas con la reparación de la ginecomastia», concluyen el Dr. Labow y los coautores. «Si bien se necesitan estudios adicionales, la evidencia actual sugiere que el potencial de complicaciones no debería limitar las recomendaciones de tratamiento en pacientes más jóvenes con ginecomastia».