La estatua de Belalcázar no volverá al Morro de Tulcán en Popayán, compromiso del gobierno con los indígenas

Noticias Popayán.

Aunque el alcalde de la capital del Cauca había advertido que sí volverían a poner a Belalcázar en su tradicional monumento, el Gobierno Nacional le dio la razón a la comunidad Misak de no reponerlo.

Tras una protesta sobre la vía Panamericana de más de cuatro horas, el gobierno nacional escuchó las peticiones de la comunidad Misak con respecto a la estatua de Sebastián de Belalcázar y su posible reposición en el Morro de Tulcán en Popayán, la decisión de común acuerdo, es que el ‘conquistador’ que los indígenas señalan de genocida, no volverá a este lugar.

El acuerdo político se firmó en Territorio Ancestral Misak de la María Piendamó este jueves.

La decisión fue que la estatua de Belalcázar, derribada el pasado 16 de septiembre del Valle del Pubén, no regrese allí y que se garantice el cuidado y protección de las piezas arqueológicas en la zona.

Lo otro, es que el “gobierno reconoce que la Pirámide del Tulcán es un espacio espiritual, ceremonial, cultural e identitario del Pueblo ancestral Misak”.

Desde el Ministerio de Cultura a través de un delegado, se explicó que se avanzará en propuestas para determinar qué monumento debe ser ubicado en ese lugar de la capital caucana.

“Delito por daño al patrimonio cultural”

La estatua fue derrumbada tras un juicio simbólico en que los herederos de la Confederación pubenense declararon al conquistador español como “culpable de delitos como genocidio, despojo y acaparamiento de tierras” y otros delitos.

A eso, las autoridades locales respondieron que había sido un delito tumbarla.

Las autoridades han dicho que ese, fue un delito de daño al patrimonio cultural de la ciudad blanca.

Así entonces, el alcalde de Popayán, Juan Carlos López Castrillón y el Mayor General Jorge Luis Vargas, Director de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, anunciaron hasta 5 millones de recompensa “por indígenas Misak que derribaron la estatua”.

“Es prioridad para la Policía y la Fiscalía identificar a los responsables de este delito”, indicó el mandatario hace unos días.

Y anunciaba que la estatua volvería a su lugar.

Sostuvo que “no estamos defendiendo una estatua, estamos defendiendo la convivencia”, escribió en su Twitter.

El debate sobre que Sebastián de Belalcázar tenga monumentos como un conquistador se ha extendido a Cali, ciudad que fundó y en donde también tiene su espacio.