As arranca un escrito elaborado por Juan Antonio Esteban, director de Recursos Humanos de Alsa y miembro del Think Tank Movilidad de la Fundacin Corell, en el que analiza el futuro que puede esperar el Sector si la tecnologa sigue, como parece, en lnea cada vez ms ascendente.
Por si no fueran pocas las dificultades que est experimentando el Sector de Transporte por Carretera, a los problemas endmicos de contratacin de conductores se une el desafo que va a suponer, en un futuro ms o menos cercano, la adaptacin de estos a las nuevas tecnologas que se estn implantando en los vehculos, apunta Esteban.
Aporta datos de un estudio de la IRU, que est siendo desarrollado por la consultora Ecorys, en el que se indica que el impacto sobre el empleo de la conduccin autnoma y conectada (CAD) en el Sector ser muy significativo a partir del ao 2030, con especial incidencia en el Transporte de Mercancas. Si se cumplen los escenarios ms agresivos, la desaparicin de puestos de trabajo podra ser de hasta un 40% en el periodo 2035-2050.
‘Si se cumplen los escenarios ms agresivos, la desaparicin de puestos de trabajo podra ser de hasta un 40% en el periodo 2035-2050’
En una industria que se enfrenta a innumerables desafos, aumentados por la crisis del Covid-19, esta prediccin podra incluso ser motivo para decidir que este problema se resolver ms adelante, si no fuera porque la necesidad actual de conductores est adquiriendo caracteres dramticos y la manera en que se resuelva esta escasez va a condicionar la capacidad del sector en el medio plazo para operar.
Esteban advierte que slo ahora la industria est empezando a concienciarse de que el problema de escasez de conductores es global y estructural. Las respuestas, que deberan ser abordadas de manera conjunta por todos los actores, evidencian una falta de capacidad colectiva, ya que la escasez de conductores profesionales tiene dos vectores: en primer lugar, la elevada tasa de jubilaciones y el abandono del sector por falta de atractivos. Por otro lado, la insuficiente incorporacin de nuevos profesionales debido a las barreras de entrada derivadas de la edad de acceso y los elevados costes en tiempo y recursos econmicos.
Con el foco puesto principalmente en una de sus causas, como los costes salariales (que no es menor, pero no es determinante), no se abordan con la contundencia necesaria otros elementos, como la necesidad de resolver la adaptacin de la Directiva Europea que regula la edad mnima del conductor profesional; los problemas de seguridad en las reas de descanso; la necesidad de reorganizar las condiciones para que las mujeres tengan una mayor presencia; o la adaptacin de contenidos y sistemas formativos.
Las previsiones de crecimiento de actividad de transporte pblico, tanto de mercancas como de pasajeros por carretera, en los prximos aos, se unen para crear un escenario de tormenta perfecta. Distintas fuentes apuntan que la necesidad de conductores profesionales ronda en algunos pases europeos porcentajes del 25%. No hacer nada, confiando en que la innovacin tecnolgica solucionar este problema socio-laboral, no es una opcin. Aun en el supuesto de que las curvas de oferta y demanda de empleo se cruzaran en un momento del futuro (algo poco probable, pues segn la Comisin Europea, se prev un incremento del 42% en la demanda de transporte de pasajeros y un 60% en el de mercancas hasta el ao 2050), los efectos de la inaccin pueden ser igualmente devastadores.
Peligro inminente
Sin recursos ni cambios estructurales, las empresas se vern abocadas, si no lo estn haciendo ya, a contratar personas que apenas cumplan unos estndares bsicos en habilidades de conduccin y adaptacin y, por supuesto, con nula vocacin y, por tanto, nulo apego por la profesin. Con el riesgo para la seguridad y, eventualmente, la capacidad de aportar valor en el servicio al cliente. Una fuerza de trabajo as difcilmente podr ser reconvertida para el uso de sistemas tecnolgicos avanzados ni para el desarrollo de nuevas habilidades personales.
Por eso, Esteban se pregunta: Es este escenario low cost low profile lo que necesita la industria del Transporte por Carretera? No es difcil imaginar que, en un futuro cercano, con vehculos autnomos y conectados, el perfil del conductor profesional cambiar sustancialmente. El porcentaje de su jornada dedicado a tareas clsicas de conduccin disminuir drsticamente. En su formacin, el papel de los simuladores (y la realidad virtual) ser fundamental, pues permitir practicar en situaciones muy especficas y con la flexibilidad necesaria. Las empresas podrn encontrar mejoras en costes significativas, as como optimizar la eficiencia de sus inversiones en formacin.
Si las principales responsabilidades del conductor sern capacidad de reaccin ante imprevistos y el manejo de sistemas tecnolgicos, parece claro (como seala un reciente informe de la UITP) que las habilidades cognitivas como la capacidad de mantener la atencin, seleccionar informacin del entorno o la toma de decisiones rpidas son caractersticas a evaluar, algo muy lejos de lo que se est haciendo ahora. Quizs es el momento de pensar en organizaciones que provean del conocimiento especializado y en servicios externos de seleccin, formacin y evaluacin para las empresas, con la consiguiente optimizacin de los costes. Las certificaciones profesionales, objetivas y adaptadas a la realidad del Sector, tendrn un papel destacado, adems de contribuir a aumentar el estatus de los profesionales. Y otros muchos factores derivados del progreso, como la sensorizacin de las cabinas para detectar parmetros fisiolgicos en el conductor que garanticen la seguridad, van a afectar desde el empleo a la industria en su conjunto.
Por todo ello, Esteban concluye que este es un problema que exige que las partes implicadas, tanto las Administraciones (Transporte, Interior y Educacin) como las Asociaciones Profesionales, empresas, agentes sociales, autoescuelas, salgan del bucle en el que se encuentran y propongan e implanten soluciones novedosas y efectivas para impedir un eventual colapso en la industria del Transporte por Carretera.