Redacción
Y con esta vocación nace NEXT de Kristau Eskola, una iniciativa que busca ser un espacio para la reflexión y el diálogo con vocación de generar conocimiento sobre la transformación de la educación y repensar cómo será la educación del futuro. Para ello ha reunido a personas de reconocido prestigio para tratar de buscar soluciones y respuestas a las principales preguntas que hoy están sobre la mesa.
Desde cuestiones centradas en la digitalización como qué y cómo debemos enseñar ante un cambio de escenario como el actual, qué papel debe jugar la tecnología en la educación o qué hace falta para que los centros educativos logren este fin, hasta preguntas que implican a las familias, la educación emocional de los alumnos, su seguridad…
Para intentar responder a la pregunta de qué papel debe jugar la tecnología en la educación, hablamos con Dolors Reig, psicóloga social y experta en educación 2.0, que cree que vivimos un cambio de paradigma en la educación hacia los formatos multimedia.
Dolors Reig
Psicóloga social y experta en educación 2.0
«Las tecnologías nos dan muchísimos superpoderes que, bien usados, nos pueden conducir de alguna forma a crear superhéroes en nuestro jóvenes; y mal usados nos pueden llevar a crear super villanos», señala la experta. De hecho, a su juicio, la tecnología debe jugar un papel auxiliar a la educación desde un punto de vista humano. «Creo que ahora más que nunca tiene que intentar individualizar la educación».
No en vano, la alfabetización multimedia es el lenguaje actual. «Vivimos un cambio de paradigma en la socialización de nuestros jóvenes, en los usos que hacen del lenguaje, de la comunicación hacia los formatos audiovisuales y creo que debemos incorporarla a la escuela no solamente viendo documentales multimedia sino dando a los alumnos un papel proactivo en la creación de vídeo, en dejar presentar trabajos en vídeo, exámenes en video…», destaca Reig, que defiende que «el liderazgo de la incorporación del multimedia a la educación tiene que ser por parte de los jóvenes». «Es uno de los temas en los que debemos ceder las riendas y dejar que sean ellos los que nos permitan incorporar todas estas tecnologías al aula para hacer una educación más motivadora, más adaptada a su lenguaje, al lenguaje actual».
Un cambio de paradigma educativo en el que la labor del docente es mucho más de organizador, en contraposición con la figura de liderazgo que ejercía antes. «Partíamos de un paradigma de educación vertical, de arriba abajo, y vamos hacia un paradigma mucho más horizontal en el que el alumno tiene mucho que aportar, sobre todo a nivel de herramientas».
Las redes sociales
Las tecnologías están cambiando la forma de enseñar y de aprender, aunque no puede llegar a sustituir la presencialidad. «Uno de los errores que cometimos al principio de todo el movimiento escuela 2.0 fue pensar que el docente ya era prescindible. Todo lo contrario. Cuanta más tecnología tengamos, cuantas más potencialidades tengan los jóvenes, más necesaria es su guía, su orientación, su manejo ético en valores, en cultura que haga que todo eso llegue a buen puerto».
«Los ciudadanos del siglo XXI deberán tener una serie de nuevas competencias que ya van teniendo, se trata de incorporarlas a la educación. Para mi las fundamentales son: el trabajo en equipo, que creo que ya es prácticamente imposible trabajar solo; y todo lo relacionado con la comunicación multimedia. Creo que ya no se trata de escribir bien, que también, pero sobre todo, se trata de aprender a comunicar bien en el formato de vídeo», advierte Reig.
Y, en este sentido, las redes sociales son elementos a incorporar en la enseñanza como lugares en los que nuestros jóvenes están socializando. Siempre digo que son las nuevas plazas del pueblo, los nuevos espacios públicos». Por ello la experta concluye con una idea clara, «si no las incorporamos en la enseñanza vamos a perder la oportunidad de educar a nuestros jóvenes en el entorno natural de socialización actual que son las redes sociales».
