Alrededor de 500 participantes asistieron a la cumbre del jueves cerca del Museo del Louvre en París, impulsada por el presidente francés, Emmanuel Macron, y el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach.
Los líderes mundiales y empresariales han prometido miles de millones de dólares en financiación y se han comprometido a apoyar diversas iniciativas deportivas destinadas a acelerar el desarrollo sostenible, un día antes de la inauguración oficial de los Juegos Olímpicos.
Unos 500 participantes, incluidos 50 jefes de Estado y de gobierno, asistieron a la cumbre del jueves en París, impulsada por el presidente francés, Emmanuel Macron, y el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach.
«Es la sinergia de nuestras acciones y todo lo que podemos hacer juntos con el movimiento deportivo lo que es absolutamente esencial», dijo Macron.
«Los Juegos son una forma de dar visibilidad a lo que hacemos y lanzar nuevas iniciativas. Gracias a todas las donaciones que se han movilizado para los continentes africano, latinoamericano y del Pacífico, y por el compromiso diario en esta dirección».
Los líderes acordaron compromisos en materia de educación y empleo, salud y nutrición, igualdad, inclusión y sostenibilidad, entre otros temas.
Una coalición de bancos públicos de desarrollo y otras instituciones financieras se comprometieron a invertir 10.000 millones de dólares (9.200 millones de euros) en todo el mundo en infraestructura deportiva comunitaria, inclusiva y sostenible para 2030.
La Agencia Francesa de Desarrollo anunció que liberará 500 millones de euros para el desarrollo sostenible en el deporte de aquí a 2030.
El COI también anunció un aumento del 10% de su presupuesto dedicado a la solidaridad olímpica, que asciende a 650 millones de dólares (599 millones de euros) para 2025-2028.
El presidente senegalés, Bassirou Diomaye Faye, declaró que «el ideal olímpico se ve hoy cuestionado por la tragedia de la guerra, por la violencia en todas sus formas y por la desigualdad cada vez mayor entre las naciones».
«Esta es también la oportunidad de llamar la atención de la cumbre para abordar la insoportable maldición del racismo y la discriminación racial que está arraigada en el deporte en un contexto de trivialización del discurso del odio y la xenofobia», dijo.