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Líneas férreas reviven como corredores verdes | Infraestructura | Economía

Líneas férreas reviven como corredores verdes | Infraestructura | Economía

El protagonismo de los ferrocarriles como medio de transporte en Colombia se remonta hoy a los libros de historia. En el siglo XX la red férrea nacional llegó a contar con más de 4.000 km y 20 ferrocarriles, y puso a andar importantes negocios como el café, que usaba los vagones para transportar el grano; los textiles, que dependían de los rieles para importar insumos, e incluso, a la industria automotriz, que usó los trenes para movilizar hojalata.

(Reactivación: Con tantas vías por intervenir ¿cuáles priorizar?). 

Sin embargo, casi la mitad de estos ferrocarriles no llegaron a usarse si quiera, con los años los malos manejos administrativos, la corrupción, y la crisis financiera sepultaron al sistema, y hoy, de los 3.338 km que conforman la red nacional, 1.750 km, 52% del total, están inactivos desde hace más de 40 años.

Ante la imposibilidad de recuperar estos corredores, el Gobierno Nacional, por medio del Instituto Nacional de Vías (Invías) decidió lanzar ‘Vive Colombia: Vías Verdes de Colombia’, un plan para recuperar los precios de la antigua red inactiva, los cuales están en desuso, y aprovecharlos para usos alternativos, como actividades culturales, deportivas, turísticas y ambientales.

“Vamos a recuperar esos antiguos túneles, puentes férreos, esos corredores antiguos pero que ya no se pueden usar para ferrocarriles, haremos de las estaciones sitios de encuentro, y los caminos tendrán señalización”,
explicó el director general del Invías, Juan Esteban Gil.

En muchos casos, estos predios ya no cuentan si quiera con rieles o infraestructura férrea, muchos han sido invadidos o están deteriorados por el vandalismo o por antiguos derrumbes.

En cuanto a las estaciones, de acuerdo con la entidad hay más de 400 que son patrimonio arquitectónico del país. “Muchos de estos edificios se están cayendo. Las estaciones se volverán espacios de encuentro, con actividades comerciales y sitios de información turística”, explicó Gil.

Aunque el Gobierno expidió en noviembre del año pasado el Plan Maestro Ferroviario y está trabajando en la presentación ante el Congreso de la República de la nueva Ley Ferroviaria, pues hay normas que no se actualizan hace más de 100 años, estos corredores quedan fuera del plan pues sus condiciones topográficas, geográficas, ambientales o sociales impiden su uso para transporte.

“La política férrea del país definió que estos sitios quedan en desuso, prácticamente no se pueden rehabilitar para transporte”, enfatizó el director del Invías.

EL PILOTO 

El primero de estos corredores cobrará vida en Cundinamarca, entre Facatativá y La Mesa. El Invías abrió la licitación pública del corredor por $23.000 millones, para la cual recibió seis ofertas, y su adjudicación seria el 26 de marzo.

Con este piloto se buscan recuperar 50 km de vía férrea, y se espera que las obras de adecuación estén listas a finales de este año para que sea puesto al servicio de los usuarios.

Además, se proyecta que se generen 120 empleos a raíz de las obras y que cerca de 450.000 personas se vean beneficiadas con su ejecución.

“Con este primer tramo piloto esperamos garantizar la conservación, y a la vez recuperar ese patrimonio arquitectónico que tenemos en esos corredores, trayendo turistas y deportistas para que se apropien de esos espacios y les demos un bien uso”, dijo Gil.

Además, la entidad ya tiene identificados otros cuatro corredores para próximas licitaciones que corresponden a las conexiones entre Manizales – Chinchiná, en Caldas; el antiguo ferrocarril de Amagá en el suroriente antioqueño, entre La Pintada y La Estrella; Armenia- Salento (Quindío) y Soacha- Salto del Tequendama, en Cundinamarca.

Laura Lucía Becerra Elejalde
En Twitter: @LauraB_Elejalde

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