Tras la rebaja en el grado de inversión de Colombia por parte de Fitch Ratings de BBB- a BB+, con una perspectiva estable, el país aún es sólido a pesar de esa calificación, según Richard Francis, analista de la calificadora.
«Estamos bastante seguros de que Colombia puede manejar mucho del ruido local y económico”, dijo Francis en una entrevista.
(Vea: ¿Seguirá subiendo la inflación anual en el país?).
«Si el Gobierno es capaz de reducir el déficit y cumplir con los objetivos de la nueva regla fiscal, y comienza a caer la deuda con respecto al PIB, creo que empezará a ganar credibilidad. En ese tipo de escenario, yo podría ver un giro hacia una acción positiva de calificación. No a corto plazo, en unos cuatro o cinco años«, comentó Francis.
El analista dijo que es mucho más fácil para un país recuperar el grado de inversión después de perderlo, que un país que nunca antes lo ha tenido.
En promedio, recuperar el grado de inversión toma siete años.
Como aspecto positivo, Francis destaca que el país aún tiene instituciones sólidas, un banco central independiente (el Banco de la República), una meta de inflación y «ha hecho un buen trabajo» en el manejo de la volatilidad causada por la pandemia.
(Vea: Por ventas de combustibles, exportaciones en mayo crecieron 39,4 %).
Otros aspectos que podrían ayudarle a Colombia para mejorar la calificación, según Fitch son:
– Lograr saldos fiscales primarios sostenidos consistentes con una relación Deuda / PIB en constante disminución, para mejorar la credibilidad de la política fiscal.
– Mayor crecimiento económico sostenido a mediano plazo por encima de los promedios históricos de Colombia, de aproximadamente 3,5%;
– Mejora constante de los indicadores de gobernanza que conducen a una mayor cohesión social y al impulso de las reformas, mejorando la posición fiscal estructural de Colombia, así como las perspectivas de crecimiento a mediano plazo.
Fitch es una de las calificadoras de riesgo que le hace seguimiento a la situación económica del país.
DECISIÓN DE REBAJA
Un elemento clave para decidir la rebaja fue el Marco Fiscal de Mediano Plazo que presentó el Gobierno con los pronósticos económicos y fiscales de mediano plazo.
«Una de las cosas que más nos llamó la atención es que el próximo año el déficit fiscal será del 7% del PIB, y nuestra estimación rondaba el 5,5%«, dijo Francis.
(Vea: Paro y restricciones podrían afectar desempeño en el segundo trimestre).
En su opinión, la deuda no parece estabilizarse y sus altos niveles pondrían a Colombia en una situación vulnerable en caso de otra crisis en el futuro.
La duda estaba del lado fiscal y su deterioro con niveles altos de endeudamiento, déficits crecientes, la suspensión de la regla fiscal y el uso de ingresos extraordinarios para cumplir las metas
Dijo también que no ve claridad en lo que quiere el Gobierno en la próxima reforma tributaria.
Otro aspecto negativo es que el impacto principal de una reforma tributaria se evidenciara principalmente a partir de 2023.
ELECCIONES
El bajo índice de aprobación del presidente Iván Duque dificulta que el Congreso apruebe grandes reformas, especialmente antes de las elecciones presidenciales de 2022 y de cara a crecientes demandas sociales.
(Vea: Fitch Ratings también le bajó el grado de inversión a Colombia).
Eso sí, las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo en 2022 no tendrán un gran impacto en la calificación crediticia del país.
Iván Duque tiene niveles de popularidad bajos.
Para el analista, «por definición, cualquier tipo de elección viene cargada de incertidumbre. Podría existir el riesgo de grandes cambios de política. Pero no creo que ese sea nuestro escenario base, sin importar quien gane».
(Vea: Banco digital colombiano Lulo Bank, autorizado para funcionar).
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