SEÚL: El principal grupo de lobby de médicos de Corea del Sur dijo el domingo (9 de junio) que iría a huelga el 18 de junio para protestar contra el plan de reforma sanitaria del gobierno, desafiando una advertencia del primer ministro de que tal acción dañaría la credibilidad de la comunidad médica. .
La Asociación Médica Coreana, que según dice representa a los 140.000 médicos del país, dijo que el 74 por ciento de los miembros que participaron en una votación aprobaron la «acción colectiva».
El presidente de la asociación, Lim Hyun-taek, dijo que el plan del gobierno destruiría el sistema médico del país y no haría nada para cambiar los problemas crónicos de menos médicos trabajando en disciplinas esenciales y una compensación inadecuada.
«Con el apoyo de representantes de todo el país, la Asociación Médica Coreana (KMA) estará al frente de la lucha para rescatar el sistema médico», dijo Lim en una reunión a la que asistieron representantes de varios grupos médicos.
Lim dijo que los miembros dejarían de trabajar el 18 de junio y que había planes para una manifestación masiva.
Los médicos surcoreanos se oponen a un plan para aumentar en 2.000 el número de nuevos estudiantes que ingresan a las facultades de medicina, desde los 3.000 actuales, una pieza central de la reforma sanitaria del gobierno.
Miles de médicos en formación, incluidos pasantes y médicos residentes, abandonaron sus trabajos el 20 de febrero, lo que obligó a los principales hospitales a recortar los servicios que no eran de emergencia y devolver a los pacientes a las salas de emergencia.
El gobierno dijo que el aumento es necesario para compensar una grave escasez de médicos que empeorará en los próximos años.
Justo antes de la reunión de la KMA, el gobierno pidió al grupo que no tomara ninguna medida que pusiera en riesgo la seguridad del público, diciendo que asestaría un golpe a la reputación de los médicos y disminuiría la confianza en la profesión médica.
El Primer Ministro Han Duck-soo dijo que cualquier acción colectiva de los médicos era ilegal y profundamente lamentable y reiteró el llamado al diálogo para resolver el enfrentamiento.
«La confianza social que la comunidad médica y los pacientes han construido durante muchas décadas no debe colapsar debido a demandas radicales de unas pocas personas», dijo Han en una conferencia de prensa.