Redacción
Tarde o temprano lo habrían descubierto igualmente, pero el confinamiento impuesto por el coronavirus aceleró las cosas: uno de los trabajadores del Centro de Conservación y Restauración de la Filmoteca Española, trabajando desde su casa, encontró una película desconocida hasta la fecha, oculta desde hace décadas bajo una catalogación errónea, que podría cambiar los registros históricos del cine español.
Bajo una ficha que anunciaba la película ‘El secreto de La Pedriza’, del autor Francisco Aguiló Torrandell, se hallaba en realidad la pieza ‘Mallorca’, un cortometraje documental rodado probablemente en los años 30 y firmado por una directora desconocida para todos en el momento del fortuito descubrimiento: una tal María Forteza.
Y aquí radica uno de los principales elementos de interés de esta producción: si finalmente se comprueba que el filme se realizó entre 1932 y 1934, como indica una de las hipótesis desarrolladas por los expertos, podría tratarse de la primera película sonora dirigida en España por una mujer.
Hasta ahora, ese lugar histórico le corresponde al largometraje ‘El Gato Montés’, de la cineasta barcelonesa Rosario Pi, producido en 1935. Pero eso podría cambiar pronto…o no.
¿Quién es la misteriosa María Forteza?
«Estuvimos un mes intentando averiguar, sin éxito, quién era María Forteza» –reconoce Carlos Reviriego, director de Programación de la Filmoteca Española–. No era una figura conocida por ningún historiador o ningún especialista en cine mallorquín o español de aquel tiempo… era una completa desconocida».
Ante ese aparente vacío de información, tomaron una decisión creativa: «Decidimos incluir la película en la programación online que ofrecimos durante la cuarentena, y ponerla así al alcance de la ciudadanía, con la esperanza de que hubiera algún ‘feedback’, quizá, alguna respuesta ciudadana de alguien que pudiese saber quién es María Forteza».
Y dio resultado. «Fue ciertamente eso lo que ocurrió– cuenta Reviriego–: a los pocos días, una periodista, Laura Jurado, de la página web Industrias del Cine, se puso manos a la obra y acabó localizando incluso a los parientes vivos de María Forteza».
La misteriosa directora de ‘Mallorca’ resultó ser una cupletista y artista de variedades mallorquina, relativamente popular en la farándula local de los años 20 y 30, que contrajo matrimonio con el productor cinematográfico Ramón Úbeda. Con él se embarcó en varios proyectos fílmicos, entre los cuales figura ‘Mallorca’.
«Lo que viene a demostrar este hallazgo –concluye Reviriego– es lo que han venido advirtiendo determinada historiografía y en especial las teorías feministas a lo largo de décadas: que realmente la mujer ha sido borrada de la historia. Y en este caso es flagrante, literal: hace 40 años ni siquiera se la catalogó».
Otro misterio por resolver: la verdadera fecha de producción
Precisamente ha tenido que ser el nombre de su marido, Ramón Úbeda, lo que se ha utilizado como clave para determinar en qué año pudo realizarse el cortometraje de María Forteza. En los créditos del filme aparece una pista interesante para los expertos de la filmoteca: una alusión al sistema de registro sonoro empleado en la película, el llamado «Úbeda Sistema Español», creado y aplicado al cortometraje por el propio Ramón Úbeda, lo que en teoría, según los investigadores, permite situar la obra entre los años 1933 y 1934, adelantando en unos dos años a ‘El gato Montés’ de Rosario Pi.
Sin embargo, no es la única tesis abierta sobre la edad del filme. Otro interesante detalle de la película sugiere otra posibilidad, y empuja la posible fecha de creación a un momento posterior incluso al inicio de la Guerra Civil (1936-1939).
Se trata de una pequeña pintada realizada en el pedestal de una estatua, visible en una de las tomas que el cortometraje ofrece del Paseo del Borne, en la ciudad de Palma de Mallorca. «Allí podemos ver, muy pequeñita, al fondo del plano, una inscripción que no se lee bien, ni siquiera ampliando mucho la imagen», detalla Reviriego, que explica, no obstante, que «contrastando con algunas otras imágenes y fotografías de la época, podemos concluir que ahí pone ‘Arriba España'», un lema franquista mucho más habitual tras el estallido de la guerra que antes.
Tal como explica el director de Programación de la Filmoteca Española, «eso haría más complicado que la película fuese filmada antes de 1936». Si bien «algunos especialistas consultados sostienen que también puede ser anterior a ese año, otros historiadores directamente lo descartan», expone Reviriego.
Aunque la película está en un estado de conservación más que aceptable –sobre todo si se tiene en cuenta que únicamente se conservan entre el 10 % y el 15 % de las películas de nitrato de esa época– la intención de la Filmoteca Española es acometer cuanto antes su restauración. «Eso nos va a dar más datos», asegura Reviriego, situando en ese momento el comienzo de «una tercera fase de la investigación que, ya en contacto directo con el material original, arrojará más información para obtener una fecha más exacta».
«Una buena película documental»
Las circunstancias especiales en que ha aparecido esta película, el misterio que se cernía sobre su autora y la incógnita de su fecha no deberían distraernos de otro aspecto esencial: la calidad de su contenido. ‘Mallorca’ es una filmación de carácter documental, de siete minutos y cuarenta segundos de duración, integrada por imágenes de paisajes de la isla y sus gentes. Pero lo que le insufla un espíritu especial es su intención: inspirada por la música del compositor español Isaac Albéniz, pretende ser un homenaje a su obra.
«La película no sólo nos llamó la atención porque estuviera dirigida por una mujer, sino por el tipo de película que es», explica Reviriego, que señala que ‘Mallorca’ «es un documental turístico pero no es un documental turístico al uso«.
«No es el típico documental turístico que va de un monumento a otro hasta convertirse en algo pesado y aburrido –continúa Reviriego–, sino que se percibe que detrás hay un gusto y un conocimiento técnico del lenguaje cinematográfico». Este experto destaca además «la edición y el montaje, el tipo de narrativa visual que presenta, en consonancia con la música de Isaac Albéniz, en la que se inspira».
«Todo eso nos hizo pensar que detrás de esta obra hay una persona que sabe donde colocar la cámara, que sabe lo que está haciendo y que tiene una sensibilidad y un gusto especial para retratar la belleza de la isla y a sus gentes», cuenta el trabajador de la Filmoteca, añadiendo que, «por lo tanto, es una buena película documental».
Este hallazgo, una vez subsanado el error de catalogación que mantuvo oculta esta joya rara, planta ahora una semilla de suspicacia en los trabajadores de la Filmoteca Española, de la que brota, de momento, una pregunta necesaria: ¿Cuántas otras mujeres habrán sido injustamente borradas en la historia del cine?
David Romero
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