Redacción
Normalmente las actualizaciones de media vida suelen ser muy leves –en algunos casos apenas se modifica el diseño de las llantas-, pero no es el caso de Hyundai que decidió realizar modificaciones tan profundas en la Santa Fe que podríamos considerarla casi una nueva generación. En junio fueron develadas las primeras imágenes que ya anticipaban un replanteo estético total, pero la marca coreana aún se reservaba información sobre su mecánica y equipamiento. Ahora, la firma de Seúl finalmente develó estas características para el modelo que será lanzado próximamente en Estados Unidos, luego en Europa y que podría arribar a nuestro país si los impuestos no elevan demasiado su precio.
Comenzando por las novedades tecnológicas, el SUV incorporó un paquete de asistentes de conducción compuesto por alerta de colisión frontal con frenado automático, sensor de punto ciego, alerta de cambio involuntario de carril con corrección de la dirección, alerta de tráfico cruzado y para abrir las puertas. También dispone de un asistente de estacionamiento autónomo, puede ser en paralelo, perpendicular, de frente o hacia atrás y no necesita intervención del conductor, ni siquiera para operar los pedales como en otros vehículos. Bastará con solo dar la orden desde un smartphone para que la Santa Fe se estacione, sin que el conductor esté en su interior. Dicho sea de paso, desde esta aplicación, que se convierte en una llave digital, se podrá encender el motor, la climatización o destrabar las puertas.
En cuanto a conectividad, estrena un nuevo sistema multimedia con pantalla táctil de 10,25” compatible con Andrioid Auto y Apple CarPlay –sin cables-, cargador inalámbrico, instrumental 100% digital con display de 12,3” configurable por el conductor, head up display y equipo de sonido Premium, firmado por Harman Kardon. Afortunadamente, a pesar de todo este despliegue tecnológico, no pierde los comandos físicos, más intuitivos que una interfaz completamente táctil.
Otra modificación muy importante se da en su mecánica: la renovada Santa Fe dejará de lado el motor naftero 2.4 por un nuevo 2.5 Smartstream con inyección mixta –directa e indirecta- de 193 CV y 25,2 kgm de torque, asociado a una caja automática de 8 velocidades. Asimismo, también ofrecerá una versión turbo de este propulsor, que eleva la potencia hasta los 280 CV y 42,6 kgm de par, en este caso acoplado a una nueva caja automática de doble embrague y 8 marchas junto con el sistema de tracción integral HTRAC.
Mención aparte para la variante híbrida, que combina el motor naftero 1.6 T-GDI de 180 CV con un motor eléctrico de 60 CV con el que desarrolla en conjunto 228 CV y 27 kgm de torque, unidos a una transmisión automática de 6 velocidades y al sistema de tracción integral de la versión 2.5 turbo. Es probable que se agreguen versiones diésel, pero al tratarse de una presentación para el mercado estadounidense, no fueron reveladas.
A nivel de diseño, los cambios ya se conocieron meses atrás: la nueva Santa Fe cuenta con un frente con un aspecto muy deportivo en el que se destaca una enorme parrilla con un entramado de formato hexagonal y que se une a los faros principales formando una suerte de máscara. Por encima de ellos continúan ubicándose las luces de circulación diurna cuya firma luminosa dibuja una suerte de T que se extiende también en los faros principales. El paragolpes contribuye a esta imagen más deportiva con una gran toma de aire en la parte inferior y dos más en los extremos. Por último, sobresalen además las nervaduras del capot, complementando esa mirada agresiva a la que hicimos referencia al principio.
De perfil los cambios son más sutiles, manteniendo los trazos bastante marcados, la cintura alta y líneas que transmiten robustez. En esta vista se destaca el nuevo diseño de las llantas de aleación con terminación diamantada. Por último, en la parte trasera se rediseñaron los faros, que ahora se unen entre sí mediante un aplique de color rojo que se extiende a lo ancho del portón.
Puertas adentro, las modificaciones también son notables: si bien se mantienen los trazos básicos de la generación actual, se reformuló por completo de la consola central hacia abajo, con nuevos comandos para la climatización, el sistema multimedia y la selectora de marchas, que ahora se opera mediante botones.
