Lo que empezó como un sueño cuando realizaba sus estudios de ingeniero agroindustrial en la universidad popular del Cesar, hoy se convirtió en el emprendimiento innovador de Hernando Romero Gutiérrez; un joven wayuu, que creó la primera fábrica de cerveza artesanal en el departamento de La Guajira.
Legalmente constituida, la empresa de Romero Gutiérrez se llama La Wajiira Beer Company SAS “cerveza iishokana”, nombre con el que nativos y turistas puedan identificar rápidamente la cerveza local.
“La idea nace desde el 2019; fue un emprendimiento que nació en el aula de clases y fue tomando fuerza cuando le dimos la identidad al producto como tal, la pandemia nos ayudó a fortalecer el emprendimiento”, cuenta Hernando.
La fábrica, ubicada en Uribia La Guajira, produce cuatro tipos de cervezas tipo leger con 4.4 grados de alcohol y dos ediciones especiales: Sarakaana – Rubia, plasma el color del wayuu blanco (albino) es elaborada a base de cereales, malta y miel, siendo una cerveza refrescante, suave y de muy buen sabor.
La cerveza Mulat-Trigueña, a base de cereales, malta y tierra mojada, plasma el color de su gente con la tonalidad mulata, mientras que Mutsiivaa-Negra inspirada en el color oscuro del wayuu que camina bajo el inclemente sol, contiene una conjunción tenue, volátil de malta y carbón vegetal. Las ediciones especiales son la cerveza a base de Iguaraya, fruto del cardón o cactus guajiro y la cerveza de cereza, basta que caigan las primeras lluvias para que este fruto reverdezca y fructifiquen.
Actualmente el producto se distribuye en varias ciudades de Colombia: Valledupar, Cartagena, Barranquilla, Yopal, y en el departamento, en Riohacha, Barrancas, Manaure, Albania y Uribia como punto de fábrica.
Este joven, de apenas 30 años, confesó que al principio fue difícil materializar su sueño, le tocó enfrentar el rechazo de muchas personas y entes gubernamentales, que aún no se atreven a probar algo diferente y prefieren consumir las marcas de cervecería tradicional.
Sin embargo, su lucha incansable por entrar en el mercado abrió una puerta grande al participar en la convocatoria de Fondo Emprender del Sena, donde luego de acatar algunas sugerencias, fue uno de los beneficiados con la capital semilla que brinda este programa para materializar sueños.
Hernando no solo encontró en su nueva empresa una forma de generar ingresos, sino también creó empleo al contar con varios trabajadores, como son un diseñador gráfico, un contador y próximamente contaran con auxiliar de producción y un mercaderista, ya que lograron que dos de sus productos tengan registro Invima.
Es por esto que este admirable empresario guajiro les dice a los demás emprendedores del Departamento que “emprender no es fácil hay que analizar bien el mercado y cuándo se tiene una respuesta de cuál es la necesidad y enfocarse en el proyecto, todo lo que se requiere en la vida se necesita de tiempo, dedicación, no desfallecer, es un camino arduo y enriquecedor, además nos ayuda a fortalecer las habilidades blandas y fuertes que adquirimos en el desarrollo de las actividades”.
Puntualizó igualmente “quiero que este emprendimiento lo vean como propio y que al final vivan junto a nosotros la mayor experiencia en lo cultural, contada por un wayuu y vivida por quienes la consumen, para que cada turista o extranjero al llegar al municipio distinga que hay una cerveza a su altura”.
