Los cuerpos de dos jóvenes fueron encontrados decapitados y semienvueltos en bolsas de plástico de color negro durante la mañana de este miércoles en el antiguo camino a Ojo de Agua, en el estado de Guanajuato.
Fue alrededor de las 05:00 horas que elementos de la Policía Municipal fueron avisados a través de los números de emergencia 911 para informar sobre la localización de los dos cuerpos sin vida.
Las víctimas no han sido identificadas hasta el momento, pero el informe de las autoridades señala que se trata de dos jóvenes de entre 20 a 25 años. Uno de ellos vestía una playera de manga larga de color negro y un pantalón verde con camuflaje. El otro llevaba puesto un short color negro, tenis, y calcetines de color rojo.
El pecho de uno de ellos estaba cubierto por las bolsas de plástico, mientras que al otro solamente le tapaban los pies. Fue sobre los dos cadáveres que se encontró una cartulina con un mensaje alusivo al crimen organizado.
Los elementos corroboraron el reporte al llegar al lugar de los hechos, acordonaron la zona y notificaron a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Guanajuato.
Paramédicos de la Cruz Roja arribaron al sitio y confirmaron la ausencia de signos vitales en ambos cuerpos, además de certificar la decapitación de las víctimas.
Fueron los agentes de la Unidad de Homicidios de la FGE los que realizaron las diligencias ministeriales correspondientes y levantaron los cuerpos para trasladarlos al Servicio Médico Forense y practicar la necropsia.
La ubicación a la cual fueron comisionados fue en la avenida Ojo de Agua y el cruce con el bulevar Hilario Medina, entre las colonias Predio San Pablo y Quinta Los Naranjos.
Guanajuato, la entidad mexicana donde más se cometieron asesinatos en 2019, ha sido gobernada por el Partido Acción Nacional (PAN) desde hace casi 30 años.
Los gobernantes de la última década han dejado crecer los índices de criminalidad y corrupción hasta llegar al escenario actual: balaceras, ejecuciones, bloqueos carreteros, ataques con granadas, autos incendiados, secuestros y masacres a la población civil. Unas 13 personas mueren al día en la entidad.
Probablemente también influyó el golpe que dio el gobierno federal a la estructura del “huachicol” en enero de 2019. Guanajuato es un punto clave porque en Salamanca se encuentra una de las refinerías más importantes de Petróleos Mexicanos (Pemex), y las personas que viven en sus alrededores han vivido del robo de combustible durante mucho tiempo.
Sin embargo, su territorio es disputado actualmente por dos organizaciones importantes: el Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL) y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG); ambos han ensangrentado a la entidad gobernada por Diego Sinhué Rodríguez, el octavo en una línea ininterrumpida de gobernadores emanados del Partido Acción Nacional.
Los problemas graves de inseguridad y violencia comenzaron en 2013. Hoy es un enclave de corrupción y colusión entre criminales y autoridades del gobierno.
Si en 2017 se registraron 2,242 homicidios, 2018 cerró con la cifra histórica de 3,412 asesinatos.
En 2018, Miguel Márquez entregó un estado asediado por la violencia y con varios municipios tomados por grupos delincuenciales, principalmente en el sur del estado. Aún así, el PAN logró mantener la gubernatura y 25 de los 46 municipios.
La tarde del 1 de julio de 2020, 26 jóvenes fueron asesinados en un centro de rehabilitación en Irapuato y se convirtió en la masacre más sangrienta en la historia reciente del estado.
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