Ante los anuncios del presidente Gustavo Petro en torno a los primeros diálogos con la guerrilla del ELN, y la política de Paz Total propuesta por el Gobierno, la firma Control Risks analizó las implicaciones de esa coyuntura para el clima de negocios y cómo puede impactar a las empresas.
(Vea: Gobierno deroga decretos para cese al fuego bilateral con el ELN).
De acuerdo con la entidad, el giro en la estrategia de seguridad del país bajo el lema de Paz Total ‘tiene una serie de implicaciones para el ambiente de negocios que las empresas deben entender, anticipar, y manejar’, con una serie de riesgos en el ámbito político y regulatorio, riesgos reputacionales y riesgos de seguridad.
La iniciativa del Gobierno contempla negociaciones con diversos grupos armados en el país, así como una reforma a la Ley de Orden Público; un nuevo enfoque en la política contra el narcotráfico, con mayor énfasis en inteligencia para frenar exportaciones de cocaína y desmantelar redes de corrupción; y reformas a la Policía.
(Vea: ‘Universidad de la paz’, camino de Petro para llegar a la ‘paz total’).
“La estrategia de Paz Total generará particular incertidumbre para las empresas del sector extractivo, energético y de infraestructura por sus efectos en el ambiente general de negocios y en el entorno operacional de algunas zonas de alto riesgo del país”, destaca Laura Lizarazo, analista de Control Risks.
En relación con los riesgos políticos y regulatorios a raíz de estos diálogos, el reporte señala que, en especial la agenda política del ELN “contempla cambios radicales en las instituciones políticas y económicas y un modelo distinto de relacionamiento entre el Estado y la sociedad”, y que los intereses del sector minero-energético estarán especialmente afectados.
(Vea: Presidente Petro anuncia cese al fuego con Eln hasta junio de 2023).
Según Control Risks, las empresas deberán evaluar su exposición a temas como las consultas a comunidades, pues es probable que se debatan nuevas obligaciones de consulta a comunidades para proyectos extractivos; riesgos geopolíticos, pues las políticas de seguridad del Presidente “pondrán en juego los intereses de otros países como Venezuela y EE.UU., con implicaciones para la agenda de relaciones políticas y económicas más amplias”; y la posibilidad de reformas al código minero, pues los diálogos con el ELN abordarán los derechos de la minería artesanal.
(Vea: Senado aprobó el proyecto de ley de política de ‘paz total’ de Petro).
“Las declaraciones recientes del Presidente Gustavo Petro respecto a la revisión integral que realizará el gobierno de toda la titulación minera del país sí generan nerviosismo y algún grado de incertidumbre jurídica para aquellas empresas que ya cuentan con títulos vigentes”, destacó también Lizarazo.
De acuerdo con la analista, es fundamental que el Gobierno aclare de qué manera, bajo qué procedimientos administrativos y legales se realizará esta revisión, a efectos de minimizar potenciales controversias jurídicas y costosos procesos de arbitraje internacional para el Estado colombiano.
En relación con los riesgos reputacionales, Control Risks destaca que La coyuntura de negociaciones de paz implicará mayor escrutinio sobre la actuación de las empresas en zonas de conflicto, incluyendo su relacionamiento con la Fuerza Pública, y su impacto socio-ambiental en estas regiones.
“Lo anterior implica elevados riesgos reputacionales que las empresas deben manejar”, destaca el reporte.
Con relación ala seguridad, la firma consultora reconoce que las estrategias de los grupos armados principales pueden cambiar rápidamente según la evolución de los diálogos, por lo que la aparición de nuevas disidencias es muy probable, y el narcotráfico se puede incrementar por la reducción de operaciones ofensivas militares.
Si bien Control Risks considera que el riesgo de ataques directos contra las empresas se reducirá en el contexto de las negociaciones, podría incrementar dependiendo de la evolución de los diálogos.
Pero también las empresas podrían estar más expuestas a violencia indirecta, por la posibilidad de que se recrudezcan las confrontaciones violentas entre grupos armados en algunas zonas del país.
Además, se destaca la posibilidad de nuevas protestas en las zonas rurales, ante mayor expectativa de las comunidades por los diálogos con los diferentes grupos armados.
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