Niños indígenas de Barrancominas juegan con una granada, sin saber el peligro que corren

El presidente de la Asociación de Cabildos y Autoridades Tradicionales Unión de Indígenas de Guainía y Vichada (Asocauniguvi), Wilter Rodríguez, denunció que este 6 de noviembre un grupo de niños indígenas que regresaban de la escuela de Minitas, en el resguardo Minitas Mirolindo, ubicado en Barrancominas (Guainía), encontraron una granada en el camino y la llevaron hasta la comunidad, sin saber el peligro que representaba.

Según Rodríguez, los niños, de entre 6 y 8 años, venían jugando con el artefacto explosivo, que al parecer fue dejado desde la Operación del Gato Negro, efectuada en el año 2001 por el Ejército Nacional contra las FARC, en la zona de Barrancominas. Los niños lo hallaron en el sitio que anteriormente los militares ocuparon y que llamaron el PAC (Puesto Avanzado de Combate), y que hoy en día es una gravillera.

Los mayores de la comunidad se percataron de la situación y les pidieron a los niños que soltaran la granada y la dejaran a 50 metros de una casa. Rodríguez afirmó que este no es el primer caso que ocurre en esta jurisdicción, pues desde que se realizó la operación militar se han venido encontrando diferentes artefactos explosivos sobre las carreteras, alrededor de las comunidades, en los conucos y en distintas zonas.

Rodríguez hizo un llamado al Gobierno nacional y departamental para que haga un trabajo efectivo de desminado en el territorio, pues teme que pueda volver ocurrir un accidente que afecte la vida e integridad de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes indígenas. Hace aproximadamente 16 años, en el sector, una persona perdió la vida debido a la explosión de unos de estos artefactos.

El líder indígena también señaló que ya se han hecho diferentes solicitudes y peticiones a diferentes entidades para tratar de solucionar la problemática, pero que no han sido escuchadas ni atendidas.