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"No me saqué un clavo, pero sí dejé callada a mucha gente": Dilian Francisca Toro

"No me saqué un clavo, pero sí dejé callada a mucha gente": Dilian Francisca Toro

Su sonrisa de satisfacción lo dice todo. No solo terminó su gestión con un 85% de favorabilidad, sino que exactamente a 20 días de entregar el cargo fue reconocida como la mejor Gobernadora de los departamentos de categoría Especial, 1 y 2.

Sin embargo, todavía no suelta palabra sobre su futuro político, pese a que muchos la dicen presidenciable. Solo dice que no va a dejar de trabajar por la comunidad. “Esa es mi vida, mi pasión. A mí me gusta andar la calle, hablar con la gente”.

Por ahora quiere descansar un poco al lado de su familia de los 1460 días en los que estuvo al frente de los destinos del Valle del Cauca, para el cual dice que recuperó el orgullo y el liderazgo nacional.

De sus logros, pero también de sus últimos desencuentros con el alcalde de Cali, Maurice Armitage, la saliente gobernadora Dilian Francisca Toro, habló con El País.

Se le vio muy contenta con el galardón que esta semana le entregó la organización Colombia Líder…

Tengo una gran satisfacción porque le serví a mi departamento, ese había sido un sueño, ser Gobernadora del Valle del Cauca. Le serví a mi gente, lo hice con compromiso, con responsabilidad, amor, transparencia y eficiencia, porque lo hemos demostrado en los resultados que hemos obtenido. Lo fundamental: recuperamos ese liderazgo nacional, ese orgullo vallecaucano, esa confianza en lo público, que es fundamental, y en lo institucional.

¿Y qué es lo que más le genera satisfacción?

Porque trabajé 24 horas, desde las cinco de la mañana hasta muy tarde, siempre con un equipo que trabajó conmigo de la mano y además porque siempre el sector público y el privado habían estado muy divorciados y pudimos lograr una articulación entre ellos y con la academia y ejercer un liderazgo colectivo. Eso hizo posible que generaramos una ruta para el Valle del Cauca de desarrollo social y económico que hoy compartimos todos y genera un desarrollo a mediano y largo plazo donde todos estamos de acuerdo. Trabajé con todo mi cariño, amor y responsabilidad en estos cuatro años. Tengo que decir que lo primero que pensé cuando llegué, como mujer, fue que había que arreglar la casa en el sentido financiero, y como médica, por el tema de la sensibilidad social, en poder ayudar y siempre pensar en el bienestar de la gente. Entonces, en cuanto al arreglo de la casa, cuando vimos una deuda de $590.000 millones, más otras del No POS de más o menos $250.000 millones, lo que pensamos fue en hacer depuraciones y conciliación del pasivo pensional y trabajar para poder mejorar nuestras finanzas y después de eso logramos ocupar el primer puesto en el desempeño fiscal, porque logramos aumentar ingresos, racionalizar gastos y llegar a categoría especial, por lo que además nos calificaron en triple A, que nunca la había tenido el Departamento.

¿Fue así como consiguió recursos para la inversión?

Claro, esa organización nos dio la posibilidad de invertir porque los recursos se pudieron liberar y era importante poder invertir en infraestructura, pero sobre todo en proyectos y programas que beneficien a las personas. Entonces, con la ayuda del Ministerio de Hacienda, pagamos deudas que se le debían a las EPS, pero pagándole directamente a los hospitales, pues el principal reto que teníamos era salvar el Hospital Universitario, que estaba ad portas de la liquidación.

¿Pero cuál fue el secreto para lograr toda esa gestión de la que usted hoy se enorgullece?

Primero, mi equipo entendió que trabajar conmigo era de sacrificio, responsabilidad, eficiencia. Aquí se miden los impactos y las ejecutorias. Cada ocho días hago comités técnicos de infraestructura y seguimiento a los proyectos, y con transparencia, que es muy importante. Segundo, haber trabajado con todos los sectores pensando en el desarrollo del Valle. Cuando empecé a trabajar tanto, pues la gente vio resultados, sobre todo en el sector financiero y en los hospitales, y eso generó confianza y así es mucho más fácil llevar estas cosas a la realidad. Creo que fue muy importante también la inclusión. Nosotros hicimos un Plan de Desarrollo transversal, donde incluimos todos los sectores: a la población indígena le hicimos un Plan de Desarrollo y les hemos cumplido; a los afrodescendientes les hicimos el Plan Decenal y ya lo estamos cumpliendo, a la población Lgtbi, a los discapacitados les hicimos mejoramiento de viviendas para los que tenían barreras de discapacidad en su casa y el Plan de Desarrollo, que fue transversal e incluyente, lo vamos a cumplir en un 95%.

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¿Y cuál fue el momento más difícil durante estos cuatro años de gobierno?

Cuando tuvimos que hacer que el Hospital Universitario entrara a la Ley 550, porque hubo una reforma administrativa, y como persona, mujer y médica sentí el dolor de ver que muchas personas no iban a estar más en el hospital, a pesar de que salían con liquidación. Solo lo superé viendo cómo el hospital crecía, porque habíamos logrado que el interés general primara sobre el interés particular, y luego muchas de esas personas volvieron a ingresar en las contrataciones del hospital porque era gente que tenía experiencia.

Por todos esos resultados positivos muchos ya la ven como posible candidata a la Presidencia, ¿qué opina?

Primero tengo que terminar, después del 31 de diciembre diremos para dónde vamos. Lo que sí digo es que yo no voy a dejar de trabajar por la comunidad. Esa es mi vida, mi pasión. A mí me gusta andar la calle, hablar con la gente, compartir con la comunidad. Yo no dejo de trabajar porque me muero. Para una persona tan activa como yo, es muy difícil. Voy a estudiar, a hacer conferencias, ya me están invitando a dar conferencias en otros departamentos, voy a asesorar y, por supuesto, el trabajo comunitario, que nunca lo voy a olvidar.

«Soy una líder social, una trabajadora de todos los días, que siempre pienso en la gente y, lógicamente, cuando
uno se dedica a la comunidad, le dan votos».

En una reciente entrevista con El País, el alcalde Armitage se quejó de la actitud que, según él, usted asumió el 21N. ¿Qué tiene que decir al respecto?

A mí no me extraña que Armitage diga eso porque desde que inicié hasta hoy no he recibido sino hostilidades. Yo he sido muy prudente e inclusive conciliadora. Cuando él, por alguna cosa que me haya hecho, me ha pedido disculpas, nunca he dejado de dárselas, pero ya llegó el momento de develar las verdades. Lo que pasó ese 21 de noviembre es que, primero, yo tengo la responsabilidad de los 42 municipios, yo soy la Gobernadora y tengo que apoyar y ayudar para que se pueda generar seguridad. Yo estuve muy pendiente de los 41 municipios, Buenaventura, Buga, Tuluá, Palmira, tenían problemas, pero a la 1:30 de la tarde ya las cosas estaban muy calmadas en el resto del Valle. Lo que me extraña es que de pronto el Secretario de Seguridad de Cali no le haya comunicado al Alcalde, pero como a esa hora él me llamó y me dijo: ‘Doctora, es que estamos evaluando el toque de queda. ¿Usted qué opina?’. Y dije: ‘Yo opino que se debe declarar’, porque ya estaban empezando los bloqueos y algunos brotes de vandalismo. Entonces no sé qué le pasó al Alcalde o si fue que el Secretario de Seguridad no le dijo o si es que de pronto él (Armitage) está mintiendo.

Ya viendo que el departamento estaba bien, a las dos de la tarde me fui para el PMU de Cali a apoyar, a ver qué podía hacer allá. El decreto de toque de queda lo sacó a las 4:30, yo ya estaba allá, y no sé si se confundió, pero como a las 8 de la noche Jamundí y Candelaria también iban a decretar toque de queda, incluso Jamundí lo alcanzó a hacer, pero los oficiales de las Fuerzas Armadas me dijeron: ‘Nosotros no tenemos capacidad, porque estamos metidos aquí en Cali’. Entonces les dije a los alcaldes: ‘No hagan toque de queda todavía, espérense que vayan las Fuerzas Especiales y evalúen’, pero ya el toque de queda lo habían puesto en Cali hacía rato. Pero además de eso, también quiero desmentir al Alcalde de Cali en lo siguiente: quién pidió refuerzo del Ejército y la Policía fue Dilian Francisca Toro, y lo pedí en el PMU, se lo dije al Ministro porque en la Alcaldía estaban diciendo que todo lo iban a controlar, y yo, que estaba recibiendo miles de llamadas al celular, dije: ‘Tenemos que reforzar el Ejército y la Policía, porque en este momento no tenemos suficiente Fuerza Pública para que no nos vulneren el toque de queda, porque un toque de queda sin tener Fuerza Pública en la calle, no es toque de queda’. Se lo dije al Ministro y además lo dije en tono de: ‘Si no nos envían más Fuerza Pública, el toque de queda no sirve de nada y vamos a seguir con los problemas de los vándalos aquí en Cali’. Entonces yo prácticamente le dije al General, ‘páseme el micrófono’ y lo dije.

Cuando usted comenzó su mandato había temores de que no lo pudiera terminar por los líos judiciales que tenía. ¿Se sacó el clavo al respecto?

No me saqué el clavo, pero logré demostrar que era inocente, que no tenía nada qué ver con lo que decían y que había falsos testigos. Eso se lo debo a Dios. Cuando estaba en campaña decía: ‘Yo tengo mi frente en alto porque no he hecho nada y no va a pasar nada porque yo sé que no he hecho nada’, y, a pesar de las malas intenciones y la maledicencia de la gente, con trabajo y con todo este esfuerzo que hicimos, pudimos demostrar que uno puede hacer una gestión eficiente, transparente, responsable y, que independientemente de que sea política, porque los políticos o el sector público tiene generalmente el rechazo de la gente, lo podíamos hacer muy bien y generar confianza institucional. Entonces no es que me haya sacado el clavo, pero sí dejé calladas a muchas personas.

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«Quiero decir que este trabajo lo hice con la Asamblea y quiero agradecerle porque fue muy receptiva a los proyectos que les presentamos».

La herencia

Algunos dicen que Clara Luz Roldán va a gobernar bajo su sombra. ¿Qué consejo le daría para que brille con luz propia?

Primero, Clara luz tiene bagaje propio, ha sido una gestora y también ha generado resultados. Nadie quita que ella dijo: ‘Voy a continuar con el trabajo de la Gobernadora, porque estamos haciendo las cosas bien’, pero yo le recomendaría que nunca olvide a la gente y su bienestar. Con eso uno hace todo y la segunda cosa es invertir en los jóvenes, pero no pensando en su futuro sino en su presente”.



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