Norte de Santander: turismo, oferta gastronómica, relatos históricos y más | Economía

Son 40 los municipios que componen el departamento de Norte de Santander. Característico por ser un punto económico importante en el país y, ahora, por las opciones de turismo que los locales han desarrollado.

‘Donde todo comenzó’ es el eslogan que identifica a la ruta turística que actualmente se encuentra disponible en el departamento. Lo anterior, en respuesta a los importantes sucesos históricos que allí se disputaron y los relatos que cuentan sus calles y edificaciones construidas desde La Colonia. 

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La capital del departamento es reconocida por la oferta comercial que allí dispone. Especialmente en calzado y vestuario. Es, además, un centro importante de inversión nacional e internacional. 

Y, lo que pocos saben, es que también ofrece a sus visitantes variedad gastronómica y cultural. La puerta de la frontera, como también se le conoce, “es una ciudad de negocios donde hay espacio para disfrutar. Es segura y tiene cercanía con varios lugares para conocer y ver paisajes naturales muy bellos”, explica Lina Silva, miembro de la Cámara de Comercio de Cúcuta. 

Al día, en esta ciudad, entran y salen alrededor de 40 vuelos desde su aeropuerto Camilo Daza. Asimismo, ofrece a sus alrededores conexiones con otros seis aeropuertos internacionales. 

Más allá de su conexión con la frontera, Cúcuta se ha convertido en un lugar para conocer la historia de La Independencia. Museos, casas antiguas y lugares patrimonio han hecho que el turismo sea potenciado en la ciudad. 

Junto a ello, los locales han desarrollado una amplia gama de opciones para la vida nocturna. Es un lugar que también cuenta con alternativas de agroturismo, turismo responsable, ecoturismo y turismo religioso. 

En la perla del norte y sus alrededores la gastronomía se ha convertido en un atractivo. En Cúcuta, por ejemplo, el visitante encuentra opciones de diferentes comidas nacionales e internacionales bajo el sello de platos de autor, recetas tradicionales o combinaciones.

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Entre sus platos icónicos se destaca el cabro, el pastel de garbanzo y el mute. A sus alrededores, en municipios como Pamplona, las colaciones son las protagonistas.

Asimismo, el departamento, según cuentan sus habitantes, fue el lugar que dio la entrada al café al país. Por ello, son amplios los cultivos de este producto. Actualmente con más de 500 productores según la Cámara de Comercio. 

En Norte de Santander es posible encontrar desde deportes extremos hasta turismo religioso. Los municipios ofrecen diferentes opciones para todos los gustos. En Chinácota, por ejemplo, fincas sostenibles, casas con cultivos o glampings para parejas son algunas de las opciones. A esto se suma tour de graffitis y avistamiento de aves. 

Más hacia el norte, en Arboledas está el turismo de aventura con la posibilidad de conocer más de 11 cascadas y torrentismo, rappel, canyoning, canoping, tubing y rafting. Asimismo, diferentes tour como el de lácteos, panela, café, cacao y la ‘sascha’ (el maní de los pinca).

También, a unos cuantos minutos de Cúcuta están los Pozos Azules. Una maravilla natural de aguas cristalinas con entrada libre a los turistas y muy segura. 

En los municipios de Pamplona, Chinácota, Villa del Rosario, Ocaña las opciones son amplias. Estos lugares ofrecen turismo de dos días o más. Asimismo, el transporte entre ellos es de precios accesibles y sencillo. También está Playa de Belén, pueblo patrimonio por su conservación y preservación. Allí se ve cero contaminación visual y auditiva.

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La puerta de la frontera, como se le conoce a Cúcuta, ofrece variedad de museos para sus visitantes. Desde reliquias religiosas hasta los aposentos del general Francisco de Paula Santander.

El Gobierno Nacional anunció que la reapertura de la frontera con Venezuela se daría el próximo 26 de septiembre. Decisión que tiene con altas expectativas al sector comercial y, por ende, de turismo.

Los locales destacan que por ahora la frontera es totalmente segura y el paso de un lado hacia a otro se hace de manera tranquila. No obstante, su cierre tuvo impacto directo en el turismo. 

Por ejemplo, en el paso de colombianos a lugares turísticos en Venezuela como Mérida y la isla Margarita. Con la reactivación de este corredor y las aerolíneas, las empresas venezolanas tienen listas amplias opciones turísticas en el país vecino. 

“Es seguro, está conservado, lo han arreglado en los últimos años y hay opciones para todos los turistas”, cuenta Elizabeth Di Dio, propietaria de Somos Mérida.

Comerciantes de la zona, a su vez, destacan que la migración cada vez es más baja y que en los últimos meses se ha visto un importante retorno de los venezolanos a sus país por una progresiva mejora de las condiciones sociales en dicho país. 

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