La inflación en toda Australia aumentó al 6,8 por ciento durante los últimos 12 meses, ya que los precios de la construcción y el combustible continúan golpeando el bolsillo trasero de la nación.
La Oficina de Estadísticas de Australia informó el miércoles que en el mes de julio la inflación aumentó al 7,0 por ciento antes de caer al 6,8 por ciento en agosto, frente al 6,1 por ciento de junio.
Es la primera publicación mensual del indicador sobre el Índice de Precios al Consumidor, en comparación con la publicación trimestral, y ayudará a asistir mejor a los formuladores de políticas a tomar mejores decisiones sobre el estado de la inflación.
David Gruen AO, estadístico australiano, dijo que la ligera caída desde agosto se debió a la disminución de los precios de la gasolina.
“Los mayores contribuyentes, en los 12 meses hasta agosto, fueron la construcción de viviendas nuevas, con un aumento del 20,7 por ciento y el combustible para automóviles, con un aumento del 15,0 por ciento”, dijo.
“La leve caída en la tasa de inflación anual de julio a agosto se debió principalmente a una disminución en los precios (de la gasolina).
“Esto hizo que el movimiento anual de combustible para automóviles cayera del 43,3 % en junio al 15,0 % en agosto”.
Los precios de los alimentos también aumentaron, impulsados por los mayores costos de las frutas y verduras, del 9,1 % en junio al 18,6 % en agosto.
El Dr. Gruen dijo que la publicación proporcionó una «indicación temprana» de las cifras esperadas en el trimestre de septiembre, que se publicarán el día después de que el tesorero Jim Chalmers entregue su presupuesto el 25 de octubre.
Se espera que las cifras refuercen las expectativas de que el Banco de la Reserva aumente las tasas otros 50 puntos básicos cuando se reúna el próximo martes.
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