Seis trabajadores humanitarios y un trabajador del distrito de salud resultaron heridos, uno de gravedad.
Personas vulnerables en riesgo
Los ataques obligaron a una organización humanitaria a suspende sus clínicas móviles y actividades para mejorar el acceso al agua potable de unas 11.000 personas en áreas remotas en la prefectura de Basse-Kotto.
“Cada vez que los trabajadores humanitarios son atacados, las vidas de miles de personas vulnerables corren peligro. Los trabajadores humanitarios que ayudan a las personas en condiciones extremadamente difíciles no deben ser atacados”, dijo la Sra. Brown.
La RCA tiene una población de alrededor de cinco millones de personas, más de la mitad de las cuales dependen de la asistencia humanitaria.
Un entorno desafiante
El país se encuentra entre los más desafiantes para los trabajadores humanitarios, según la oficina de asuntos humanitarios de la ONU, OCAHy los incidentes de seguridad dificultan la entrega de la ayuda que se necesita desesperadamente.
Entre el 1 de enero y el 15 de abril de este año se registraron unos 43 incidentes que afectaron a organizaciones humanitarias allí, con 11 trabajadores humanitarios heridos.
El año pasado se registró al menos un incidente por día, la mitad de los cuales fueron robos, robos e intrusiones.
“Los civiles son las principales víctimas del conflicto en la República Centroafricana y la asistencia humanitaria es una cuestión de vida o muerte para millones de personas. Los trabajadores humanitarios que acudan a su rescate de manera neutral e imparcial deben tener acceso libre y seguro”. dijo la Sra. Brown.
Más de tres millones de personas en la RCA, el 63 por ciento de la población, necesitará ayuda humanitaria este año.
La cifra incluye a 2,2 millones de personas con necesidades graves que, según los humanitarios, podrían no sobrevivir sin la asistencia y protección necesarias.
El año pasado, las agencias ayudaron a cerca de 1,8 millones de personas en situaciones de emergencia.
