Durante dos días, el Defensor Nacional del Pueblo, Carlos Alfonso Negret realizó un recorrido por las comunidades del río Naya, zona rural de Buenaventura. La población hace un mes tiene miedo por el resurgir de grupos armados ilegales en la zona.
Entre abril y mayo, desaparecieron tres miembros de la comunidad, mientras uno más fue secuestrado, cuando una comisión de la Defensoría del Pueblo y la Personería de Buenaventura intentaba sacarlos de la población por amenazas.
El Defensor conoció de cerca la realidad de los habitantes del río Naya, donde aún hay familias que se resisten a abandonar su territorio. “Esta visita me deja un sabor agridulce, es una tierra fecunda, necesitamos que esa fecundidad se vuelva en temas de salud, educación y seguridad” aseguró Negret.
También indicó que las comunidades de Las Pavas, Concepción, Joaquincito, Puerto Merizalde y San Francisco, hay confinamiento, porque no pueden salir a pescar ni cosechar sus productos, por lo que pidió mayor presencia de la Armada Nacional.
El Defensor hizo un llamado para que “el Estado mire al Naya, tenemos que trabajar para que ahí no se siga inconando el gran mal de Colombia que es el narcotráfico”.
Desde allí, el Defensor Negret hizo un enérgico llamado al gobierno nacional para que llegue con una oferta institucional integral para los habitantes de la zona, quienes expresaron su preocupación por las precarias condiciones en materia de salud, educación y seguridad.
El País