Las reacciones al Plan Nacional de Desarrollo que radicó el lunes el Gobierno de Gustavo Petro y que se discutirá hasta el 7 de mayo no se han hecho esperar.
(Economía popular, la protagonista del Plan Nacional de Desarrollo).
La oposición y hasta la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, han hecho referencia a la hoja de ruta propuesta por el Gobierno para los próximos cuatro años. “Insólito! Es la primera vez que el Gobierno no incluye el metro de Bogotá como proyecto estratégico”, dijo la mandataria local.
Entre los puntos más polémicos del proyecto de 166 páginas que va acompañado de unas bases de 321 páginas está la creación de una nueva comisión de la verdad, cambios en la estructura de la Policía Nacional o la recuperación del Hospital San Juan de Dios en Bogotá.
En este punto resalta la creación de un registro universal del ingresos. El ideal del Plan es que todas las personas, independientemente de sus ingresos, empiecen a declarar renta y que esa información pueda servir después para focalizar mejor los subsidios. Para la creación de este Registro Universal de Ingresos, que administraría el Departamento Nacional de Planeación, un artículo del documento indica que el Gobierno podría acceder a información reservada que tienen las entidades públicas y privadas de las personas.
(Colombia tendría un sistema de protección social universal).
También está la creación de transferencias en especie para entregar a la población más necesitada. Carlos Sepúlveda, profesor de Economía de la Universidad del Rosario, recalca que debería estructurarse de manera rigurosa pues tiene riesgos que hay que mitigar.
Otro tema controversial es la prohibición de los nuevos proyectos mineros para la extracción de carbón término a cielo abierto clasificados como de gran escala.
En cuanto a los asuntos políticos, sectores de oposición destacan 14 artículos, como las facultades extraordinarias que se le otorgan al Presidente y que, en opinión del Centro Democrático, le pueden permitir reestructurar la rama ejecutiva.
“El presidente podrá a dedo regular la política de usos alternativos de coca y sustancias psicoactivas; reformular o acabar con Familias en Acción o Jóvenes en Acción, y reestructurar a su antojo el Hospital San Juan de Dios”, aseguró la senadora Paloma Valencia.
Dentro de otros temas que pueden ser polémicos está que la Agencia de Renovación del Territorio estará adscrita al Ministerio de la Igualdad. Y también genera inquietud que el avalúo catastral de todos los inmuebles del país se ajustará durante el 2023 y el hecho de que Gobierno nacional podrá presentar proyectos de inversión que podrán ser financiados con los recursos de la asignación para la paz.
En materia de justicia, el articulado propone crear un “mecanismo no judicial de contribución a la verdad y la memoria histórica”, con funciones que serían similares a las que tuvo la Comisión de la Verdad creada en el acuerdo de paz con las extintas Farc.
(Plan de Desarrollo busca que comunidades puedan autogenerar energía).
También dispone una nueva arquitectura de la Policía para su traslado del Ministerio de Defensa para que este en manos de un organismo civil y le da facultades al Presidente por seis meses para regular las condiciones especiales de reclusión de los miembros de comunidades indígenas.
Las facultades extraordinarias también están dispuestas para que el Presidente regule “los usos alternativos de la planta de coca y del cannabis”, así como de la definición de los fines medicinales, terapéuticos y científicos de las sustancias psicoactivas. El plan busca crear una instancia de articulación entre el Gobierno y la Jurisdicción Especial para la Paz para facilitar el cumplimiento de las sanciones que esta disponga y crea el Sistema Nacional de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas.
Uno de los puntos más polémicos del PND es el artículo 298, mediante el cual se le otorgan facultades extraordinarias a Petro durante seis meses para poner en marcha políticas públicas, entre ellas, una orientada a la recuperación del Hospital San Juan de Dios.
Aunque no se conoce el plan a detalle, la idea del Presidente es evitar que la torre central sea demolida. El Gobierno busca “adquirir a título gratuito u oneroso la infraestructura del San Juan de Dios” y “crear la entidad pública (…) que la utilice para la prestación de servicios de salud”.
Otro viejo anhelo que está dentro del plan, es la creación del programa ‘Basura Cero’, el cual intentó aplicar en Bogotá en su mandato y cuyo objetivo, según Petro, es remunerar a recicladores, disminuir las tarifas de aseo y reducir el enterramiento a cielo abierto de residuos sólidos.
Otra crítica es que en el plan no hay ninguna mención a las líneas del Metro, situación que generó críticas por parte de la alcaldesa Claudia López. El Gobierno respondió diciendo que no estaban en el documento porque “están financiadas con vigencias futuras”.
Redacción EL TIEMPO