Redacción
Ver a niños pidiendo limosna en semáforos y calles es cada vez más común. La mayoría son extranjeros y aunque no se ha probado trata de personas, las autoridades están atentas.
Por Natalia Chipatecua
Un hombre cargando una bebé durante todo el día, pidiendo limosna en cercanía a la glorieta de Postobón, en Villavicencio, llamó la atención de las autoridades hace unas semanas. La ciudadanía había reportado que el sujeto permanecía desde la mañana con la niña en brazos, pero ella permanecía todo el tiempo dormida, mientras él vendía dulces o pedía monedas.
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Al hacerle los chequeos de rigor, la niña no presentaba ninguna anomalía.
Sin embargo, el fenómeno es evidente. Cada vez hay más menores de edad en condiciones de mendicidad en las calles de Villavicencio.
Basta hacer un recorrido, sobre todo a altas horas de la noche o en zonas de mayor afluencia de personas, para darse cuenta de la problemática y de la instrumentalización de los niños, muchas veces para ejercer trabajos informales.
“Empezamos a hacer estos operativos porque me parece importante que la seguridad no solamente tenga un enfoque sobre los adultos, de atracos o de estafas, sino que hay una institucionalidad que salvaguarda los derechos de los niños que debe activarse cuando hay estas situaciones agravantes”, mencionó Andrea Lizcano, secretaria de Gobierno.
Añade que: “existe demasiado riesgo para los niños ya que implica que están desescolarizados; que pueden ser objeto de un abuso o que carece de un buen desarrollo; allí es donde más fácil pueden caer en la prostitución o bandas delictivas porque ven en la calle un sustento”.
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Diferentes sectores de la ciudad han sido intervenidos de manera sorpresiva con el fin de verificar las condiciones de los menores de edad que allí se encuentran. Por lo general, son niños de edades muy tempranas que se ven en las calles más intensamente entre las 6 y 10 de la noche.
Según la secretaria de Gobierno, estos niños son de nacionalidad venezolana y, aunque no se ha podido comprobar casos de “alquiler o robo de menores”, la problemática representa un agravante más para la inseguridad y genera una señal de alerta.
Zonas más comunes
“En los semáforos de toda la Avenida 40, encontramos un niño en estado de desnutrición de menos de un año con otros niños más grandes que estaban allí con sus mamás migrantes venezolanas, quienes están solas porque sus compañeros sentimentales las dejaron y no tienen un trabajo”, explicó la funcionaria.
Así mismo, señaló que “en los semáforos entre Centauros y Amarilo encontramos una niña de 7 años, otra de dos y la otra de 3 años, donde inicialmente sus cuidadores no pudieron demostrar que son sus progenitores. Estos menores fueron dejados bajo la protección del ICBF hasta que el adulto presentara acreditación de su parentesco”.
El hecho de que un menor de nacionalidad extranjera se encuentre sin documentación, despierta otra preocupación que debe tener un seguimiento oportuno “debemos prevenir que a Villavicencio llegue y se instale la trata de niños, hemos visto situaciones en que es totalmente innecesario que los niños estén en los semáforos, porque es evidente que son utilizados para generar lastima y obtener un sustento”, expresó Andrea Lizcano.
En tres operativos realizados este año en la ciudad se han encontrado 14 niños, todos en condición de migrantes y de ellos 6 ya están bajo la protección de Bienestar Familiar.
Ahora “se está haciendo una intervención semanal donde nos reunimos todas las autoridades, y se interviene la mayor cantidad de semáforos o donde tengamos conocimiento de que están utilizando niños, niñas y adolescentes para la mendicidad”, sostuvo Angie Arévalo, jefe de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana de Villavicencio.
Añadió que “en este momento el semáforo del Parque de la Vida, Alcalá Motors (Avenida 40) y Hato Grande (Avenida Catama), son sectores priorizados por la Policía Nacional debido a las denuncias que hace la ciudadanía”, sobre el uso de menores para mendicidad.
En su gran mayoría son migrantes
Mediante el acuerdo municipal 403 de 2019 se estableció el Comité de Erradicación del Trabajo Infantil, desde el cual se realizan jornadas de búsqueda activa que logren identificar situaciones donde los menores estén siendo vulnerados.
“Salimos a los puntos donde se tiene preestablecido la presencia de posibles menores en riesgo de trabajo infantil y se hace pedagogía. Hemos hecho más de 10 jornadas de búsqueda activa; entablar procesos de seguimiento y acompañamiento a más de 51 familias con niños, niñas y adolescentes en su entorno familiar para el acompañamiento de trabajo social, de psicología y capacitaciones en las situaciones de riesgo de trabajo infantil”, aseguró Jorge Cifuentes, director de Grupo Especial de Protección, de la secretaría de Gestión Social de Villavicencio.
El funcionario señaló que se han identificado más sectores donde se ejerce este tipo de trabajo y a su vez, sitios donde se protegen los derechos de los niños indocumentados.
“Hay una estrategia de polígono en el Centro de Villavicencio, el punto del semáforo del Hotel Rosado, identificado como situación de riesgo, y el semáforo del cruce de salida a la vía Restrepo, donde se han identificado adultos que piden limosna con niños al lado. Además, hubo una situación donde no se pudo validar la identidad del niño ni la relación que tenían con los adultos que estaban con ellos”, advirtió Cifuentes.
Hace tres años, según un censo realizado por Migración Colombia, en Villavicencio había cerca de 2.000 migrantes. Ahora, a través del censo migrante para la entrega del estatuto especial migratorio se calcula que son cerca de 5.600 migrantes.
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Hay una condición de asilo que el gobierno nacional dará a los migrantes por seis años. Villavicencio es un punto focal y se presenta como una de las ciudades del país donde más puede crecer la cifra de migrantes. Advierten que podría cerrar más o menos entre los 10.000 y quizás 15.000 migrantes”, enfatizó la secretaria de Gobierno.
Periódico del Meta realizó varias preguntas a la oficina del ICBF, pero no fue posible conocer su respuesta al cierre de esta edición.
