Aunque el Presupuesto General de la Nación (PGN) ya pasó su primera prueba en el Congreso con la aprobación del monto, todavía quedan dudas sobre cómo se va a financiar, pues todavía hay $38 billones que no están asegurados.
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De acuerdo con los analistas, de los $313 billones de ingresos que espera tener el Gobierno en el 2021, todavía no se sabe cómo se van a conseguir $26,1 billones, aunque todavía hay 18 meses para definirlo, según detallan en los anexos del Presupuesto. Asimismo ocurre con los $12 billones que se esperan obtener por la “disposición de activos”, que contempla también la venta de activos de la Nación.
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Ante la duda con respecto a esos recursos, Alberto Carrasquilla, ministro de Hacienda, explicó el pasado jueves ante las comisiones económicas tercera y cuarta de la Cámara de Representantes que en cuanto a las enajenaciones, en el Presupuesto del 2020 se tenía estipulado que se obtendrían en el rubro de disposiciones de activos unos $7,3 billones, que todavía no se han conseguido, y que se espera obtener $12 billones para este año. Según el funcionario, la coyuntura por el coronavirus ha dificultado el proceso, pero esperan lograrlo para el cierre de este año.
De igual manera, explicó que, como se planteó en el Plan Nacional de Desarrollo, hay maneras de disponer del patrimonio sin privatizar, simplemente hacer mejores usos de los capitales. Tenemos un retraso en ese programa, pero en ese contexto dijimos que necesitábamos trabajar en el sentido de utilizar mejor los recursos públicos, para financiar actividades estatales y estamos planteando por eso unos $12 billones”, explicó.
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Por otro lado, Juan Alberto Londoño, viceministro de Hacienda, le dijo a este diario en días pasados que, para el caso de las enajenaciones de activos y sobre si hay hay dificultades para venderlos, explicó que “siempre dejamos un rubro de enajenaciones, que no quiere que vayamos a vender ninguna, pero tampoco es decir que no lo vayamos a hacer. Depende de la dinámica que hay en el mercado y si están bien pagas. Uno no saldría a vender una empresa en un momento en el que te la van a pagar mal. Entonces, siempre lo hacemos como una provisión de salir de algún activo, pero no quiere decir que lo vayamos a hacer”, manifestó.
Dada la discusión, Juan Oviedo, asesor de finanzas públicas del Observatorio Fiscal de la U. Javeriana, alerta que si estos recursos no se pueden conseguir el próximo año, el Presupuesto podría quedar desfinanciado y habría que hacer recortes en programas sociales. “Todavía no está claro de dónde se van a conseguir esos recursos y lo más preocupante es que dicen que tienen 18 meses para definir de qué manera los van a conseguir”, agregó.
Por su parte, Mario Valencia, profesor de la Universidad Nacional, y quien ha estudiado el Presupuesto, también dijo que es una preocupación que no se aclare que la mayor parte del aumento que hubo en las cuentas para el 2021 tiene que ver con un aumento de la deuda, lo cual es preocupante para las finanzas públicas, en caso de que supere el 60% del PIB.
“Llama la atención que la inversión ha sido la que más ha aumentado para impulsar la reactivación en otros países, pero en Colombia el incremento ha sido muy bajo, y lo que más ha subido es el servicio de la deuda”, afirmó Valencia.
Asimismo, el Banco de la República y la Contraloría, en un debate del PGN, también llamaron la atención sobre estos recursos, pues señalan que todavía no está claro de dónde provienen o si se puedan conseguir el otro año, teniendo en cuenta la coyuntura económica del país. En el caso del ente de control, señalaron que es clave que el Minhacienda aclare la información detallada de los $12 billones de disposición de activos, y los otros $26 billones.
En cuanto a los recursos de balance, “que corresponden a los ingresos provenientes de la liquidación del ejercicio presupuestal inmediatamente anterior, tendrían un crecimiento de 284% al pasar de $3,2 billones en 2020 a 12,3% billones en 2021”, dice el documento que publicó ese día en el debate.
De hecho, la Contraloría explicó que, si se comparan lo que ha pasado en otros años con respecto a la disposición de activos y el rubro de otros recursos de capital, se ve que la ejecución de esos ingresos sigue siendo muy baja, pues en 2018 y 2019 fue de 14% y 0%, respectivamente.
Otra de las alarmas que prendió la Controlaría sobre los ingresos para el otro año son los recursos que pueden entrar por el recaudo del IVA, teniendo en cuenta que esperan que este rubro crezca 42,4% para el 2021 con respecto al 2020, “lo cual se considera elevado frente a la dinámica de la economía”, dice el ente de control.
En ese punto, Oviedo también llamó la atención sobre si ese es un cálculo “muy optimista” para lo que realmente se pueda recaudar el próximo año.
“El mayor recaudo del IVA es otra fuentes de posible desfinanciación, sumado a unos recursos que espera obtener y utilizar el Gobierno el otro año de caja. Eso es una alarma y hay que revisar en detalle, porque sigue siendo un riesgo para las finanzas públicas”, manifestó Oviedo.
En cuanto a los recursos de caja, que dice el Ejecutivo que le pueden sobrar este año, Carrasquilla explicó en su intervención que “esperamos que la caja del Gobierno va a terminar con unos $22 billones de pesos al final del año. Menos lo que se utilizaría el otro año, esos recursos pasarían a ser de $9,7 billones al cierre del 2021. Eso significa que hay un ajuste, lo que representan el 10% de la vía de los recursos de capital”, añadió.
Ante ese panorama, se espera que el Presupuesto siga su curso legislativo en el Congreso y que en los debates, algunas de las mayores dudas y preocupaciones que generan las cuentas públicas en economistas, entes de control y los mismos congresistas queden resueltas.
¿REFORMA TRIBUTARIA?
Teniendo en cuenta las alarmas que ha habido por cuenta del aumento de deuda del Gobierno y una posible desfinanciación, expertos, centros de pensamiento como Fedesarrollo e, incluso, el Banco de la República, han llamado la atención sobre la necesidad de una reforma tributaria. “Retornar a las metas de la regla fiscal a partir del 2022 dependerá de la aproba- ción de una reforma fiscal que logre generar ingresos adicionales estructurales por el 2% del PIB”, dijo en días pasados el BanRep.
María Camila González Olarte
Twitter: @CamilaGolarte