Primera Persona: El Power Ranger de Indonesia

Conocida por su apodo, Ega fue una de las 15 mujeres seleccionadas para participar en la iniciativa Perempuan Inspiratif Mitra Polhut (Inspirando a las mujeres para asociarse con los guardabosques) apoyada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, cuyo objetivo es proteger el Parque Nacional Bogani Nani Wartabone y brindar oportunidades para comunidades cercanas.

“Siempre me ha apasionado la naturaleza y la conservación. Crecí en un pueblo rodeado de bosques. Mis dos abuelos me inspiraron al compartir su sabiduría local y tradicional y me alentaron a conocer el bosque y plantar árboles. Me hablaron del poder de la naturaleza y me explicaron que el idioma de la naturaleza es el idioma más antiguo de la Tierra, y por eso tenemos que escucharlo.

Es un poco místico. Por ejemplo, según las historias, si ves muchas hormigas saliendo del suelo, significa que va a llover muy pronto.

El mensaje de mis abuelos es que la energía y el lenguaje de la naturaleza deben ser apreciados y respetados.

‘Mi vida cambió’

Desde la escuela secundaria, participo activamente en el movimiento ambiental y estudié relaciones internacionales en la universidad para mantener mi mente abierta a lo que sucede en el mundo. Siempre quise volver a mi pueblo natal después de graduarme.

Mi vida cambió en noviembre de 2020 cuando me uní a la iniciativa, la primera de este tipo en Indonesia.

Recibimos capacitación policial básica y educación en habilidades de comunicación, negociación y emprendimiento.

También nos enseñaron cómo empoderar a los aldeanos locales para lograr medios de vida sostenibles alternativos y trabajar más de cerca con la autoridad del parque nacional.

Aprendí lo que hacen los guardabosques y me apasioné más por el trabajo. Ahora estoy muy orgulloso de servir a la comunidad.

Los guardabosques comunitarios ayudan a proteger especies en peligro de extinción. Hay mamíferos, reptiles y más de 100 especies de aves que tienen su hogar en el parque.

Al trabajar con los guardabosques de los parques nacionales, también desempeñamos un papel en la erradicación del crimen y la lucha contra el mercado ilícito de fauna y flora y el comercio ilegal de vida silvestre.

Trabajo al menos 10 días al mes, pero en realidad, debido a la naturaleza del trabajo, se necesita más tiempo para invertir en términos de obtener un compromiso o “aceptación” de la comunidad. Parte de esto es construir conexiones.

‘Señora de la conservación’

Se siente muy satisfactorio saber que nuestro esfuerzo puede cambiar la vida de alguien para mejor. Como cuando podemos facilitar que los grupos comunitarios obtengan certificaciones, permitiéndoles acceder a mercados sostenibles para sus productos. Creo que hay mucho más que puedo hacer por la naturaleza, pero también para mejorarme a mí mismo y a mi comunidad para tener mejores oportunidades.

Me siento animado a hablar sobre la conservación y comprometerme más con mi comunidad. Me motiva hablar con la gente. Es divertido, pero la gente de mi pueblo ahora piensa en mí no solo como Ega, sino como “la dama de la conservación”, o la persona a la que debes contactar cuando detectas actividades sospechosas de comercio ilegal de vida silvestre.

Me siento orgulloso de eso.

Inspiración generacional cruzada

Compartir conocimientos sobre la vida silvestre con la generación más joven me hace sentir útil. Lo más importante y significativo de mi trabajo es compartir la conciencia sobre la conservación y la importancia de la vida silvestre.

Si hablamos de árbol, no nos referimos solo a la hoja, sino también a las raíces.

Si están bien preparados desde una edad temprana, llevarán el conocimiento sobre la conservación y la vida silvestre al futuro.

‘Permanecer en silencio no cambiará nada’

Nuestra Tierra está envejeciendo y superpoblada. Gritar fuerte puede no ayudar, pero permanecer en silencio tampoco cambiará nada. Las mujeres podemos alzar más nuestras voces y hacer de la Tierra un lugar mejor.

Tengo un gran mensaje para la mujer joven: sé valiente. No tengas miedo de empezar a trabajar por la conservación. Necesitas animarte a dar los primeros pasos porque el primer paso es muy importante. No es tan aterrador como crees”.