«Al menos 70 (mensajes conteniendo) insultos racistas en mis cuentas de redes sociales por el momento», tuiteó el jugador poco después del final de partido.
«Para los que se empeñan en hacerme sentir todavía peor de lo que ya me siento, seguid intentándolo», añadió irónicamente.
En un segundo mensaje, Rashford añadió estar «aún más escandalizado por uno de los insultadores que dejó una montaña de emojis representando a monos en mis mensajes internos, y que es un profesor de matemáticas con una cuenta abierta. ¡Él enseña a niños!».
Unas horas antes, el delantero, reputado por sus acciones fuera de los terrenos de juego para luchar contra la malnutrición infantil, había disputado la final de la Europa League perdida (1-1, 11-10 en penales) contra el Villarreal.
El jugador de 23 años es objeto recurrente de insultos racistas en internet.
A comienzos de mayo, todo el fútbol inglés así como instancias de rugby, tenis o críquet, realizaron un boicot de cuatro días en las redes sociales para pedir medidas más drásticas por parte de las plataformas y del poder legislativo para luchar contra esa lacra.