Redacción
Las autoridades de Cali confirmaron la llegada de catorce familias de una comunidad indígena de la zona rural del Distrito de Buenaventura, debido a los hechos violentos que se han venido registrado en el puerto tras los enfrentamientos de grupos armados ilegales.
Estas personas relataron que tuvieron que salir del sector conocido como La Playita, debido a los enfrentamientos y las intimidaciones de esa organizaciones al margen de la ley, para reclutar a niños y jóvenes de esa comunidad.
«Esas personas querían que los niños y jóvenes se fueran a trabajar con ellos o sino los mataban. Nosotros decidimos salir huyendo para salvarnos, porque no queremos hacer parte de esa violencia», relató una de las víctimas de desplazamiento del puerto de Buenaventura.
Agregó que “como somos jóvenes nos querían obligar a llevar drogas, armas y a cometer otros delitos, nosotros nos opusimos y preferimos irnos del sitio.”
Estas 14 familias entre las que se encuentran 20 niños, se ubicaron en el sector del Jarillon del río Cauca en el oriente de Cali, en una vivienda donde habitantes del sector les han brindado ayudas para poder resolver sus necesidades básicas, mientras esperan tener garantías para regresar a sus territorios y poder vivir en paz.
Por su parte, el personero de Buenaventura, Edwin Patiño, afirmó que a este desplazamiento se suma el hecho de que nos 20 menores de edad se encuentran desaparecidos según sus familiares, quienes en la mayoría de los casos no denuncian por las intimidaciones de esos grupos que delinquen en el puerto.
El funcionario concluyó que los jefes de esas bandas delincuenciales tienen confinadas a muchas familias en las comunas, para poder esconderse y evitar ser capturados por las autoridades.
RCN – Diana Marcela Villegas
