Por Andrew Osborn
MOSCÚ (Reuters) – Rusia acusó el viernes a Occidente de patrocinar el «terrorismo nuclear» después de que las autoridades dijeran que un dron ucraniano había atacado la ciudad de Kurchatov, en el oeste de Rusia, donde se encuentra una central nuclear similar a la desafortunada planta de Chernobyl.
Roman Starovoit, el gobernador de la región rusa de Kursk, que limita con Ucrania, dijo que el dron ucraniano golpeó un edificio de apartamentos residenciales en Kurchatov, una ciudad de la era soviética construida a orillas de un estanque de enfriamiento para la central nuclear de Kursk que todavía está en servicio. .
«Un dron se estrelló en la ciudad de Kurchatov durante la noche», dijo Starovoit en la aplicación de mensajería Telegram. «Afortunadamente, ninguno de los residentes resultó herido. Las instalaciones críticas no sufrieron daños como resultado del accidente del dron y su posterior detonación».
El único daño fue en la fachada y el vidrio de un edificio de departamentos, agregó, y dijo que las autoridades ayudarían a los residentes a restaurar sus hogares.
No hubo una reacción inmediata de Ucrania, que es regularmente objeto de ataques masivos de drones rusos y rara vez comenta sobre sus propios ataques sospechosos de drones y sabotaje dentro de Rusia.
FURIA RUSA
El incidente, que se produce después de que Rusia dijera que había destruido dos drones ucranianos cerca del Kremlin en mayo, provocó una furiosa reacción del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dada la proximidad del dron a una central nuclear.
«¿Los países que los suministran (los drones) al régimen de Kiev planean retirarse a Marte si hay un desastre nuclear? No tendrán tiempo», dijo con sarcasmo la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Maria Zakharova.
«La gente en los países de la OTAN debería darse cuenta de que sus gobiernos están patrocinando el terrorismo nuclear por parte del régimen de Kiev».
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que los sistemas de defensa aérea de Rusia estaban funcionando de manera efectiva en medio de informes no confirmados en las redes sociales de que tales sistemas se habían utilizado para repeler el ataque con aviones no tripulados, pero dijo que era obvio que Ucrania seguía intentando atacar objetivos dentro de Rusia.
El servicio de seguridad FSB de Rusia dijo en agosto del año pasado que la seguridad alrededor de las instalaciones nucleares se había reforzado después de que personas que dijo que eran saboteadores ucranianos destruyeron las líneas eléctricas que alimentan la planta de energía nuclear de Kursk, interrumpiendo temporalmente su funcionamiento.
Alexei Likhachev, jefe de la corporación nuclear estatal rusa Rosatom, dijo el jueves a la televisión estatal que la seguridad en las plantas de energía nuclear estaba «bajo control» y que se habían tomado todas las medidas necesarias, incluidas las capacidades de defensa aérea.
Rusia y Ucrania se han acusado mutuamente durante mucho tiempo de arriesgarse a una catástrofe nuclear en otra instalación, la planta de energía nuclear Zaporizhzhia en territorio controlado por Rusia en el sur de Ucrania, a través de bombardeos.
(Reporte de Andrew Osborn; Editado por Gareth Jones y Peter Graff)