Hasta el pasado miércoles 8 de abril, cerca de 4,2 millones de deudores del sistema financiero habían recibido algún tipo de beneficio para contrarrestar los efectos de la expansión de la pandemia de la covid-19 en Colombia, y todavía hay miles de solicitudes pendientes de análisis o que harán sus pedidos a las entidades en los próximos días.
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De acuerdo con la Superintendencia Financiera, a dichos deudores les han aplicado beneficios en 5’452.000 créditos que tienen vigentes en las 43 entidades que vigila y el capital de esas obligaciones suma $87 billones.
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Las opciones más utilizadas por parte de las entidades han sido prórrogas para el pago de capital y/o intereses hasta de seis cuotas, aunque algunas ofrecen una cifra menor o diferentes opciones, incluso rebaja de intereses a quienes paguen cumplidamente su crédito mientras dure la emergencia económica, social y de salud.
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En la cifra total de deudores hay 214.615 micro, pequeñas, medianas y grandes empresas que han recibido alivios y en varios casos también obtuvieron nuevos créditos, de acuerdo con unas condiciones especiales, con motivo de la emergencia sanitaria por el coronavirus.
Así mismo, 150.580 microempresas han recibido alivios con 155.591 créditos involucrados y que registran un saldo de $735.000 millones.
Las pymes beneficiadas llegan a 59.078 con 117.540 créditos por $9,8 billones.
Otras 4.957 son grandes empresas con 17.710 obligaciones crediticias que suman $8,9 billones.
El Superintendente Financiero, Jorge Castaño, dijo que en materia de créditos de vivienda hasta el momento 402.000 hogares recibieron beneficios para pagar capital e intereses en obligaciones que suman $29 billones.
LAS CONDICIONES
Hay que recordar que el gobierno nacional, a través del Ministerio de Hacienda y la Superintendencia Financiera trazaron unas líneas para impedir que con la aplicación de beneficios se cometan arbitrariedades.
Entre ellas, que con las nuevas condiciones no se puede modificar la tasa de interés para aumentarla, no se podrá hacer capitalización de intereses, no se pueden cobrar intereses de mora y por lo tanto no le pueden cambiar la calificación crediticia.
Tampoco se puede elevar el valor de la cuota sin autorización del deudor. Entre otras de las medidas están que a los titulares de tarjetas de crédito o cupos de crédito no les pueden restringir dichos cupos por acogerse a medidas.
De acuerdo con Castaño, la entidad y el Minhacienda garantizarán este tratamiento a los deudores y aclaró qué medidas adicionales de beneficio habrá para los clientes por parte de las entidades son bienvenidas.
EL COSTO DE LOS ALIVIOS
Según el Gobierno, las cifras sobre el costo de los beneficios indican que por cada mes que dejen de abonarse las cuotas en las entidades de crédito, por cada $1 billón congelado son $55.000 millones de menos ingresos.
Para el funcionario, los países necesitan sistemas financieros fuertes que le puedan prestar a las empresas y a las personas y advirtió que “es bastante popular hablar mal de algunas segmentos, empresas o sectores de la economía y no hay otra entidad que le tome el pulso a la economía como la Superfinanciera”.
“Sé que información tengo sobre el sector y la estoy validando en cada momento”, dijo el funcionario.
Y agregó que “hay algunos que no entienden los alivios pues en ninguna parte hay condonación de intereses ni de capital”.
Y es que en el sistema financiero también es clave no olvidar la otra parte de la ecuación que son los ahorradores, quienes en cualquier momento pueden retirar sus recursos y reconocerles intereses, así sean apenas ajustados por encima de la inflación.
