Redacción
EL 30% DE LA POBLACIÓN URBANA SE SIENTE INSEGURA
Por segundo año consecutivo el programa “Buenaventura cómo vamos” entregó los resultados de las Encuestas de Percepción Ciudadana en las cuales los bonaverenses reafirmaron que los temas a priorizar en el puerto son la seguridad, el empleo y la salud.
El programa “Buenaventura, cómo vamos” presentó por segundo año consecutivo los resultados de la Encuesta de Percepción Ciudadana, que tiene como objetivo principal saber la percepción que tienen los bonaverenses en cuanto a la calidad de vida en el puerto más importante del Pacífico colombiano. A diferencia de la expuesta en 2019, la del año que acaba de terminar incluye habitantes de las zonas rurales del municipio, aunque la participación sigue siendo poca.
En el informe presentado queda claro que los ítems donde los porteños se sienten menos conformes son, en este orden, la seguridad, el empleo y la salud. En relación con el informe entregado por este programa en el 2019, estos temas también eran los que más preocupaban a los habitantes de Buenaventura, pero en un orden diferente: salud, seguridad y empleo.
“Esta encuesta es un gran instrumento que permitirá a los actores locales contar con información abierta y de calidad para la toma de decisiones públicas mucho más acertadas, y que los gobernantes puedan construir metas y retos a partir de esta información”, aseguró Amín Sinisterra Núñez, líder del programa “Buenaventura Cómo Vamos”.
Seguridad
Desde que comenzó el año Buenaventura atraviesa por una situación de violencia que tiene en vilo a gran parte de la población del puerto. Debido a la guerra interna de la banda La Local -dividida entre Los Espartanos y Los Shotas- las últimas semanas se han presentado enfrentamientos con armas de fuego, amenazas, asesinatos y desplazamientos que tienen a la ciudadanía pidiéndole al Gobierno Nacional que se invierta socialmente en esta región del país para evitar el reclutamiento forzado de menores que alimentan las fuerzas de estos grupos armados ilegales.
Sin embargo, en la Encuesta de Percepción Ciudadana no están incluidas las versiones de las personas sobre lo sucedido en las últimas semanas. Aún así, la inseguridad muestra índices altos dentro de la población porteña. En cuanto al área urbana la percepción de inseguridad es del 36%, mientras que en las zonas rurales es del 30%. Las personas que más se sienten inseguras en el casco urbano tienen entre 46 y 55 años, mientras que en las zonas alejadas son los mayores de 55 años.
“Los problemas más graves para las personas encuestadas en zona urbana son drogadicción, atracos callejeros y pandillas. Los problemas más graves para las personas encuestadas en zona rural son disidencias/guerrillas, drogadicción y tráfico de drogas”, asegura el informe. Esto responde a la situación actual de violencia que se está viviendo en el puerto, pues dentro de la ciudad son las bandas las que se disputan el control territorial y el microtráfico de drogas. En cuanto a las zonas rurales la presencia de grupos armados como las disidencia de las Farc y el Ejército de Liberación Nacional (Eln), quienes se disputan esa zona desde la salida de la exguerrila de las Farc.
Desde el informe presentado por este mismo programa a principios de 2021, el cual solo contaba con datos de diferentes organizaciones y no con la percepción de la gente, se nota un aumento en la inseguridad de Buenaventura. La tasa de homicidios pasó de 22 asesinatos por cada 100.000 habitantes en 2017 a 36 en solo dos años. La violencia contra los jóvenes entre los 15 y 24 años sigue preocupando a los habitantes bonaverenses, pues en este marge se encuentra entre el 35 y 40% de la población total del puerto. En 2017 y 2018 la tasa de asesinatos de este rango poblacional fue de 8 por cada 100.000 habitantes. En 2019 subió a 13.
La presencia de grupos armados ilegales en la zona rural y de bandas criminales en el casco urbano hacen que Buenaventura se encuentre en un coctel molotov que solo necesita una chispa pequeña para que explote, como está pasando en este momento. Estas presencias aumentan la percepción de inseguridad que tienen los porteños y deja claro que es una de las cosas que se deben trabajar desde el Gobierno municipal, departamental y nacional.
Empleo
La generación de empleo y la facilidad a la hora de conseguir trabajo es una de las variantes principales en los estudios de calidad de vida. En cuanto a esto la situación de Buenaventura es preocupante, pues el 80% de la población considera que es difícil conseguir cualquier tipo de trabajo en el municipio. Aunque con respecto al 2019, este bajó tres puntos, la cifra sigue siendo alta al tratarse de una de las zonas más importantes del país por la entrada de mercancías que tiene. Esto ayuda a la crisis social que hay en el puerto, pues aumenta la posibilidad de que las personas prefieran negocios ilegales y terminen juntándose con las bandas y grupos armados ilegales en trabajos turbios.
En el marco de la pandemia por el COVID-19 la tasa de desempleo en Buenaventura se vio fuertemente afectada. En el año 2019 fue de 20,3 por cada 100.000 habitantes, mientras que para este 2020, según la Cámara de Comercio de la ciudad fue de 26, demostrando que la dificultad para conseguir trabajo en el puerto es alta. Por otro lado, ante la imposibilidad de conseguir trabajo los bonaverenses deben acudir a los emprendimientos, sin embargo el 31% de los encuestados dicen que la posibilidad de emprender con éxito es difícil, lo que deja un panorama desolador, pues no hay empleo, pero generarlo tampoco es fácil.
Salud
Este punto es el que más ha crecido con respecto a la Encuesta de Percepción ciudadana de 2019 y en gran parte puede estar relacionado con la llegada de la pandemia por el COVID-19, pues las consultas al sistema de salud fueron del 94% y 88% en la zona urbana y rural, respectivamente. Sin embargo, el dato que refleja las mejoras en cuanto a este ítem es que en el 2019 el 45% de los encuestados dijeron estar satisfechos con los servicios de salud, mientras que para el 2020 la satisfacción fue del 57% en la zona urbanas y del 47% en las rurales.
Hasta ayer, lunes 15 de febrero de 2021, Buenaventura ha tenido 3.823 casos por COVID-19 desde que empezó la pandemia en el mes de marzo. Además en las últimas 24 horas no se presentaron fallecidos y el municipio se mantiene estable en 219 muertos a causa del virus desde el inicio de la emergencia sanitaria.
Educación
Con la llegada de la pandemia por el COVID-19 la educación ha sido uno de los sectores más afectados a nivel mundial, nacional y local. En Buenaventura no es la excepción y la deserción escolar continúa con números bastantes preocupantes para la población en general. Para el 2020 la deserción escolar fue del 1,3% lo que representa más o menos a 158.000 niños. Según las encuestas realizadas “10 de cada 100 niños, niñas, jóvenes y adolescentes entre 5 y 17 años en zona urbana y 14 de cada 100 en zona rural no asisten a un centro educativo público o privado”.
Estos índices de deserción escolar son cada vez más preocupantes en el puerto y esta es una de las principales razones por las que los bonaverenses piden ayudas que impacten en los social. Las bandas criminales y grupos armados ilegales se aprovechan de estas situaciones y terminan reclutando a los niños y jóvenes que no tienen la oportunidad de estudiar o que piensan que les va mejor entrando a una de estas organizaciones, que yendo a la escuela para después no conseguir trabajo. La tasa de desempleo en jóvenes es del 21,6%.
Otro de los puntos preocupantes en cuanto a educación es la calidad de la misma. En la Encuesta de Percepción Ciudadana realizada en el 2019, cerca de una personas de 10 se sentía insatisfecha con la educación escolar. Durante la pandemia, con todos los retos que esto trajo y la educación virtual, los resultados del 2020 muestran que ahora son 3 personas de cada 10 las que no están a gusto con el modelo educativo que se imparte en el puerto. Para la educación superior 1 de cada 4 personas está insatisfecha.
Otros aspectos
Los servicios públicos también estuvieron presentes en la Encuesta de Percepción Ciudadana, donde quedó claro que en la zona urbana el servicio con el que la gente se siente más a gusto es el gas natural, mientras que el acueducto es con el que peor se sienten. Esto cambia en la zona rural, pues el internet es el que más insatisfecho tiene a la gente y la energía eléctrica el que mejor llega a esas zonas.
Hay preocupaciones en cuanto a los servicios público en las zonas rurales, pues más de un tercio de la población no tiene servicio de aseo ni recolección de basuras en los municipios donde viven y el 35% de las personas no cuentan con acceso al acueducto.
A pesar de esto, la encuesta demuestra que en 2020, 76 personas de cada 100 no se consideró pobre. Este número de pobreza subjetiva subió con respecto al del 2019, cuando 72 de cada 100 persona tampoco pensaban ser pobres. Sin embargo, sigue habiendo problema con la alimentación pues el número de las personas que no comen las tres veces al día es alto. 17 de cada 100 y 15 de cada 100 personas de la área urbano y rural, respectivamente, aseguraron que dejaron de comer al menos una comida al día.
Otro punto clave dentro de la encuesta es lo que tiene que ver con la participación ciudadana en la política del puerto. Según las encuestas esto no es posible en el puerto debido a la “poca voluntad política (57%), intereses personales sobre colectivos (44%), participación de los mismos (40%) y baja respuesta institucional (30%)”. A pesar de eso, la imagen favorable del alcalde es del 64% y solo el 10% de la población considera que la labor del mismo ha sido mala.
El Espectador – Pablo Montoya
