En un giro inesperado, la EPS Sanitas tomó la decisión de retirar su convenio para la atención de usuarios del régimen subsidiado con el Hospital Universitario Hernando Moncaleano de Neiva. Esta noticia ha generado gran preocupación en la gerente de la entidad, Emma Constanza Sastoque, quien ha hecho un llamado urgente al Gobierno Nacional para que preste especial atención a esta situación crítica que afecta tanto a los pacientes como a la salud financiera del hospital.
Diario del Huila, Panorama
La crisis financiera que afecta al Hospital Universitario Hernando Moncaleano Perdomo no es un caso aislado, sino parte de una problemática más amplia que está afectando a hospitales públicos en todo el país. La Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos (Acesi) lidera una protesta nacional que busca visibilizar la grave situación que enfrentan estos centros de salud debido al no pago de servicios de salud por parte del Gobierno y las EPS.
Según Constanza Sastoque, gerente del Hospital Universitario de Neiva, las EPS liquidadas y en proceso de liquidación les adeudan la asombrosa cifra de 214 mil millones de pesos. Esta deuda representa un 64 por ciento de la cartera total y está casi en la categoría de imposible recaudo, lo que amenaza seriamente la estabilidad financiera del hospital y su capacidad para brindar atención de calidad a los pacientes.
La situación se agrava aún más con el retiro repentino de Sanitas, que ha anunciado la interrupción de la prestación de servicios y la dirección de los pacientes que anteriormente atendía el Hospital Universitario de Neiva. Estos pacientes fueron derivados al hospital cuando Comfamiliar del Huila, Coomeva y otras EPS liquidadas comenzaron a migrar siguiendo las instrucciones de la Superintendencia de Salud.
Constanza Sastoque lamenta la necesidad de hacer pública esta denuncia y de recurrir a la ciudadanía y a los entes de control para reportarla. La razón detrás de esta acción es que no solo afectaría la prestación integral de un servicio fundamental para la población, como lo establece el Gobierno Nacional, sino que también tendría un impacto devastador en la prestación y el financiamiento del Hospital Universitario de Neiva.
En palabras de la gerente, «Hacemos un llamado al Gobierno Nacional, a Acesi, al Congreso de la República y al ministro de Salud para que pongan sus ojos en el departamento del Huila y, en especial, en el Hospital Hernando Moncaleano Perdomo». Ella destaca la importancia de este hospital como el primer referente del sur del país, que nunca se ha negado a atender las crisis regionales y ha mantenido su compromiso de atender y salvar vidas con calidad y humanidad. Sin embargo, esto solo es posible si se garantizan condiciones financieras estables por parte de las entidades responsables del pago.
El Plantón Nacional
El Hospital Universitario Hernando Moncaleano Perdomo no está solo en esta lucha. Un total de 466 hospitales públicos de todo el país se unieron al plantón nacional para protestar por la crisis financiera que están enfrentando. Esta protesta es liderada por la Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos (Acesi).
El objetivo principal de este plantón nacional es visibilizar la crisis financiera que están atravesando los hospitales públicos debido a la falta de pago de servicios de salud por parte del Gobierno y las EPS. Según la Acesi, esta deuda está asfixiando el sistema de salud en Colombia y está al borde del colapso total a más de 350 hospitales públicos en 17 departamentos.
La deuda acumulada de las EPS con los hospitales públicos se ha incrementado a la alarmante cifra de $8.5 billones hasta el 30 de junio de 2023, según la entidad. Esta situación ha llevado a una crisis que no solo afecta a las Empresas Sociales del Estado (ESE) sino también a los proveedores y funcionarios de estos hospitales.
El director ejecutivo de la Asociación de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos (Aesa), Luis Hernán Sánchez, señala que a las deudas de las EPS se suman las obligaciones pendientes por parte del Estado, lo que eleva la cifra que afecta las finanzas de estas instituciones de salud a la asombrosa suma de $11 billones.
Sánchez hace hincapié en que el Gobierno Nacional aún no ha pagado los recursos pendientes a los hospitales, incluyendo los anticipos destinados para la vacunación contra el covid-19. Además, el Ministerio de Hacienda tiene deudas pendientes relacionadas con bonos pensionales y cuotas partes jubilatorias que aún no han sido saldadas.
La consecuencia más inmediata de esta crisis financiera es que varios hospitales se ven obligados a cerrar algunos de sus servicios, priorizando la atención de urgencias. Muchos de estos centros médicos ya no cuentan con los recursos necesarios para pagar la nómina de su personal asistencial, la seguridad social y los insumos médicos a los proveedores. Algunos incluso han manifestado que carecen de fondos para pagar los servicios públicos básicos.
Esta situación representa un peligro grave para la salud pública en Colombia, ya que limita la capacidad de los hospitales para brindar atención médica de calidad a la población. Los pacientes se ven atrapados en medio de esta disputa financiera entre el Gobierno, las EPS y los hospitales, y su acceso a servicios de salud es cada vez más incierto.
La decisión de la EPS Sanitas de retirar el convenio para la atención de usuarios del régimen subsidiado con el Hospital Universitario Hernando Moncaleano de Neiva es solo la punta del iceberg de una crisis financiera que afecta a hospitales públicos en todo Colombia. La deuda masiva de las EPS y la falta de pago por parte del Gobierno están estrangulando el sistema de salud y poniendo en riesgo la atención médica de miles de colombianos. La protesta nacional liderada por la Acesi es un llamado de auxilio para que las autoridades nacionales tomen medidas urgentes y resuelvan esta grave situación que amenaza la salud y la vida de la población.
