Wong también respondió a una pregunta sobre cómo el liderazgo de cuarta generación (4G) de Singapur profundizará los lazos con China.
Dijo que la relación entre los dos países se ha construido sobre la confianza mutua desarrollada durante generaciones, a través de años de amistad y trabajando juntos en múltiples proyectos.
Estos proyectos incluyen el proyecto del Parque Industrial China-Singapur Suzhou, lanzado en 1994 para desarrollar un municipio dentro de la provincia de Jiangsu, y la ciudad ecológica Sino-Singapur Tianjin, cuyo objetivo es construir un distrito ecológico de 30 kilómetros cuadrados.
Wong agregó que un «círculo virtuoso» de confianza a nivel de liderazgo les ha permitido desarrollar proyectos que son relevantes para ambas partes.
«Y creo que si podemos continuar manteniendo este alto nivel de confianza, entonces podremos hacer avanzar nuestra relación y lograr nuestros objetivos de una asociación mejorada, una de alta calidad y orientada al futuro».
En respuesta a una pregunta sobre el papel de Singapur para facilitar el entendimiento mutuo entre Estados Unidos y China, Wong dijo que Singapur debe ser realista sobre lo que puede o no puede hacer.
«No podemos recetar políticas para EE. UU. y China, no podemos decirle a ninguno de los dos países qué hacer. Pero nuestro objetivo es seguir siendo amigos de ambos en la medida de lo posible», dijo Wong.
«Y si cualquiera de las partes quiere conocer nuestros puntos de vista, estaremos muy felices de compartir con ellos nuestras perspectivas de manera franca y objetiva».
Al comentar sobre la relación de las superpotencias, dijo que sería «muy difícil» hacer que las relaciones entre Estados Unidos y China vuelvan a ser lo que solían ser.
«Pero esperamos que pueda haber una manera… de desarrollar una nueva base para esta relación, una en la que probablemente habrá una competencia muy intensa en muchos frentes, pero al menos algunas medidas de seguridad para evitar una escalada, para prevenir malentendidos y para manejar las áreas de diferencias».
