HOBART, Australia: Anwar Ibrahim, elogiado como el mejor ministro de finanzas de Asia en la década de 1990, presentó el viernes (24 de febrero) su primer presupuesto desde que asumió el cargo de Primer Ministro de Malasia hace tres meses.
La última vez que lo hizo fue hace 26 años. El tema de su presupuesto es “Membangun Malaysia Madani” (Desarrollo de una Malasia Civil). La gente está examinando detenidamente el discurso de 85 páginas en busca de respuestas a una pregunta simple: «¿Es este un presupuesto electoral?»
Ahora, esta puede parecer una pregunta extraña dado que Malasia acaba de celebrar sus elecciones generales en noviembre del año pasado. A lo que la gente se refiere es a las próximas elecciones estatales (que deben celebrarse por ley) en Penang, Selangor, Negeri Sembilan, Kelantan, Terengganu y Kedah. Estas elecciones decidirán si la administración de Anwar permanece políticamente estable.
En las 15 Elecciones Generales de Malasia (GE15), la mayor sorpresa fue la “ola verde” o el ascenso del Parti Islam Se-Malaysia (PAS) y los votos islámicos. Si Anwar no puede recuperar los votos islámicos, que es lo mismo que el voto del corazón malayo, entonces habrá inestabilidad política.
La coalición Pakatan Harapan (PH) de Anwar recibió menos del 15 por ciento de los votos malayos en GE15. El socio de coalición de PH, UMNO, recibió alrededor del 30 por ciento de los votos malayos, lo que le dio al gobierno de Anwar cierta legitimidad entre la población mayoritaria.
Por lo tanto, es crucial que PH y UMNO obtengan la mayoría de los votos en Kelantan, Terengganu y Kedah, que actualmente están dirigidas por PAS, un partido que forma parte del bloque de oposición Perikatan Nasional (PN).