Redacción
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No es novedad que en todo el mundo muchas personas estén perdiendo sus empleos a causa de la pandemia, y de la crisis económica que ha traído consigo.
Muchos son los otros que han logrado mantener sus empleos, pero con reducciones considerables a sus ingresos mensuales.
En época de crisis es completamente normal sentir incertidumbre y hasta miedo, pero la diferencia está en si solo te sientas a lamentarte o si haces algo por qué la situación sea un poco mejor, o más llevadera.
La crisis económica apenas está comenzando, y aún se espera que haya más despidos a nivel mundial.
En México, durante la primera quincena de abril, entre 5.2 y 8.1 millones de personas reportaron haber perdido su empleo, ser descansadas de manera obligatoria o no poder salir a buscar trabajo debido a la contingencia, de acuerdo con una encuesta realizada por el Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad de la Universidad Iberoamericana (EQUIDE).
Así mismo, se mencionó que en el 37.7% de los hogares mexicanos al menos un integrante ha perdido su empleo o fuente de ingreso, mientras que otro 30.1% piensa que es muy probable que alguien de su hogar pierda su puesto de trabajo.
Si te encuentras en esta situación, o bien, crees que podrías llegar a estarlo, te comparto 5 consejos que te ayudarán a enfrentar la reducción de ingresos.
1. Simplifica tus gastos
Imagen: Jp Valery vía Unsplash
Lo primero que debes hacer al percibir menos ingresos es buscar qué gastos mensuales puedes reducir. Esto te ayudará a mantener controladas tus salidas de dinero, y a no gastar en cosas que realmente no necesitas.
No adquieras deudas nuevas, no utilices tu tarjeta de crédito para hacer compras innecesarias (recuerda que ese es dinero que el banco te presta y deberás pagarlo) y no hagas compras emocionales. Ahora más que nunca deberás pensar con la cabeza fría.
2. Fuentes de ingreso
Imagen: Josh Appel vía Unsplash
Aunque aún tengas tu empleo y el mismo salario, recuerda que nada está garantizado y menos durante una crisis económica. Te recomiendo buscar otras formas de generar ingresos. Desde vender un producto o servicio que en estos momentos tenga más demanda, hasta atreverte a hacer freelancing.
Tal vez ahorita tengas que realizar trabajos que no te gusten del todo, pero será temporal.
3. Habla con tu familia
Imagen: Les Anderson vía Unsplash
Aunque pueda parecer un punto simple u obvio, hay muchas personas que no comparten estas situaciones con sus familiares, lo que no permite que todos sean más conscientes de la situación. Hablar con ellos no solo te brindará soporte emocional, sino también te podrá ayudar a simplificar gastos o a generar otra fuente de ingresos. Y definitivamente, tener a tu familia cerca ayudará a que la crisis sea más llevadera.
4. Ten un plan B
Imagen: Olivier_Le_Moal vía Envato Elements
De acuerdo, ya sabes que te redujeron el sueldo o que puedes perder tu empleo. ¿Ya tienes tu siguiente paso? Está bien sentirnos mal, está bien estar triste y llorar, pero también necesitamos hacer que las cosas sucedan. Crea tu plan B, estudia los posibles panoramas que se puedan presentar. De esta manera, estarás mejor preparado. Hay que seguir adelante.
5. No es el fin del mundo
Imagen: Clément Falize vía Unsplash
Sé que puede parecer que esto será eterno y que el mundo se va a acabar. Pero recuerda que vivimos en un mundo en donde las crisis económicas seguirán sucediendo.
Toma lo que puedas de la experiencia para que en el futuro estés mejor preparado y para que te puedas blindar.
Tal vez, ahora logres entender la importancia de comenzar a invertir, de tener un seguro de vida, de gastos médicos mayores… y todo esto te dará la oportunidad de implementarlo en el futuro.
Sé que no es fácil la situación actual, pero si solo esperamos sentados por un milagro a que alguien más resuelva las cosas por nosotros, no llegaremos a nada.
Ocúpate, reduce tus gastos, busca nuevas fuentes de ingresos y mantente cerca de los tuyos, para que esto no sea únicamente amargo.
La baja en este ciclo económico pasará, y podremos regresar poco a poco una nueva normalidad.
