Redacción
La integración de WhatsApp, Instagram y Messenger no implicará que se conviertan en una sola aplicación, sino que, al pertenecer al mismo ecosistema, los usuarios de una de las aplicaciones podrán comunicarse con quienes tengan cuenta en otra de ellas sin necesidad de inscribirse en esos servicios.
Un portavoz de Facebook explicó que la integración también supondrá que todos los productos de mensajería pertenecientes a la compañía estarán protegidos por cifrado de extremo a extremo, y añadió que el nuevo sistema facilitará el acceso a amigos y familiares a través de las distintas redes.
Con este movimiento, ideado e impulsado por el propio Mark Zuckerberg, Facebook pretende ganar influencia sobre otros servicios de chat ampliamente utilizados en los Estados Unidos como iMessage de Apple. Las críticas, no obstante, también han estado presentes: muchos expertos consideran que podría suponer un peligro para la privacidad de los usuarios en relación a la difusión de sus datos personales en terceras aplicaciones.
Facebook, que en 2017 ya empezó a unificar servicios, tiene ahora un año para trabajar en este desafío: el nuevo proyecto debería ver la luz en 2019.
