Transición verde, eje para el desarrollo de América Latina | Infraestructura | Economía

De acuerdo con la última edición de ‘Perspectivas Económicas de América Latina (LEO 2022), hacia una transición verde y justa’, realizada por la Ocde, la Cepal, el CAF, la Comisión Europea (CE) y presentada en la Conferencia Académica Anual de la Universidad del Rosario, la región debe transitar hacia una visión verde como una oportunidad para construir un modelo de desarrollo más sostenible, inclusivo y que genere mayor valor agregado.

(Vea: Colombia es primera opción en inversión para energías limpias).

Con base en las organizaciones internacionales, América Latina y el Caribe tiene el desafío de actuar con una agenda ambiciosa para proteger y valorar el capital natural y energético único de la región, con el fin de promover el desarrollo de nuevos sectores económicos que permitan la creación de empleos de calidad.

Sin embargo, las instituciones enfatizan en que, para avanzar esa transición, se “deben movilizar cuantiosos recursos financieros”, repesando los sistemas tributarios y la política fiscal en general.

A su vez, Marco Llinás, director interino de la Cepal, manifestó que la transición verde trae consigo oportunidades para los aparatos productivos de cada país, por lo que se requerirá de emprendimientos e innovaciones, viendo ese tránsito como una oportunidad de negocio en la sostenibilidad.

(Vea: Se empiezan a apagar tres proyectos de la subasta de 2019).

Los países necesitan de agendas que articulen a todos los sectores, teniendo a la sostenibilidad como un foco para incluirlas dentro de sus políticas de desarrollo productivo”, dijo.

Según los resultados, esa transición verde puede ayudar a la región a mejorar su modelo de desarrollo y reducir su vulnerabilidad al cambio climático. Es por esto que 13 de los 50 países más afectados por este factor son de América Latina y el Caribe.

En total, de los 11.933 sucesos meteorológicos extremos relacionados con el clima que se registraron en todo el mundo entre 1970 y 2022, un 17,1% se produjeron en la región”, destacan.

Por otra parte, se manifiesta que a pesar de las consecuencias causadas por el cambio climático, la región continúa aumentando de forma sostenida sus emisiones totales de gases efecto invernadero (GEI). Las instituciones estiman que entre 1990 y 2019, el nivel de emisiones aumentó en 1.223 millones de toneladas equivalentes de dióxido de carbono, lo que representa un incremento del 61%. De igual manera, el peso de la región en las emisiones globales fue de 8,1%.

(Vea: Propuestas del sector eléctrico para reducir las tarifas de energía).

Se manifiesta que una matriz energética más sostenible y diversificada ayudará a la región a reducir dichas emisiones y aprovechar el potencial de los «vastos» recursos energéticos renovables y a impulsar el acceso universal a la energía.

Según el documento, en 2020, las energías renovables representaban el 61% de la generación regional de electricidad. De esta cifra el 75% correspondía a energía hidroeléctrica, y el 25% a energía solar, eólica, de biomasa y geotérmica.

Llevando la mirada hacia el largo plazo, Sebastián Nieto, jefe para América Latina y el Caribe del Centro de Desarrollo de la Ocde, indicó que “los ciudadanos de la región están preocupados por la gravedad del cambio climático que son mayores que en otras regiones del mundo. Esto sugiere que la recuperación podría representar una oportunidad clave para avanzar hacia un nuevo contrato social que ponga la sostenibilidad ambiental en el centro”.

Frente a la decarbonización, se estima que la economía debe estar acompañada de niveles de inversión adecuados, tanto en los sectores públicos como privados, dirigida a reglones potencialmente verdes, para “mitigar las posibles disrupciones que la descarbonización generaría en el mercado laboral”.

(Vea: ‘Debemos pedir que se acelere la transición energética’: Andi).

Igualmente, el directivo de la Ocde resaltó que, si se logra implementar una estrategia de descarbonización efectiva, acompañada de niveles de inversión suficientes en sectores verdes, la creación neta acumulada de empleo verde y formal puede llegar a ser del 10,5% en América Latina.

De acuerdo con las estimaciones del informe de las organizaciones, la región se enfrenta al reto de financiar la transición verde con un espacio fiscal reducido.

Un escenario de calentamiento global de 2.5°C podría costar a la región entre el 1,5% y el 5,0% de su PIB de aquí a 2050. Dado que el costo de no actuar es elevado, los países deben desarrollar políticas fiscales ambientalmente sostenibles, como planes de infraestructuras que contemplen la adaptación y mitigación del cambio climático”, aseguran.

PORTAFOLIO

Fuente de la Noticia

Related posts

Esta es la empresa que llegó al país con robots para el agro | Agro | Economía

Minhacienda reveló nuevos detalles de su plan de reactivación | Finanzas | Economía

‘Mujeres son mejores pagando, pero les dan créditos más bajos’: presidenta de Mibanco | Finanzas | Economía