Mientras que millones de colombianos permanecen en sus hogares para acatar la cuarentena, los transportadores de carga (por vía terrestre y aérea) no han detenido sus labores. Prueba de ello, por ejemplo, es que en los puertos y carreteras no deja de verse el movimiento constante de caravanas de camiones que mueven las exportaciones e importaciones que son realizadas de forma rutinaria.
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Así, para reforzar las operaciones del transporte de bienes en medio de la actual coyuntura, los transportadores se sumaron a la iniciativa del Gobierno para poner en marcha un Centro de Logística y Transporte de carácter transitorio –que operará desde las oficinas del Invías, en Bogotá- para garantizar el abastecimiento de alimentos e insumos básicos en el territorio nacional.
“Durante la emergencia nos encargaremos de velar porque el transporte de bienes objeto de abastecimiento se haga racionalizando los recursos del Estado y de quienes estén involucrados en la prestación de este servicio público”, dijo la ministra de Transporte, Ángela María Orozco.
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A su vez, Henry Cárdenas, presidente del gremio transportador Fedetranscarga, cuenta que en medio de esta coyuntura los conductores se han encontrado con que en los puertos la operación es más lenta. Asimismo, relata que decenas de camiones se han quedado parados en estos con insumos de clientes cuyas empresas han cerrado sus puertas temporalmente.
“Los conductores han sido cuidadosos con los temas de prevención del virus”, afirmó Cárdenas. Por otra parte, indicó, los conductores que de noche transitan con mercancías de primera necesidad han sido escoltados por caravanas de la Policía.
Entretanto, el presidente de Colfecar, Juan Miguel Durán, aseguró que las empresas de carga vienen desarrollando sus actividades con las precauciones adecuadas y “con el firme compromiso de garantizarle a los colombianos el abastecimiento de productos esenciales como alimentos y medicamentos”.
Y pese a la disposición de los diferentes gremios del transporte para movilizar carga a ciudades y municipios, Durán explica que se ha reportado una reducción en las importaciones y exportaciones. Sin embargo, agrega que “ha habido una labor muy intensa por parte de las empresas de mensajería y paquetería debido al incremento de compras virtuales”.
Para aliviar la operación del transporte de carga, el Gobierno ha tomado decisiones como reducir el precio de los combustibles, eliminar el cobro de peajes (en vías concesionadas y en aquellas a cargo del Invías) y, también, facilitar el funcionamiento de negocios clave para los transportadores como restaurantes, talleres, hoteles, entre otros. Por su parte, en puertos como Cartagena y Buenaventura el mensaje a exportadores, importadores y navieras ha sido claro, pues la continuidad de las operaciones se garantizó pese a las restricciones.
TRANSPORTE AÉREO, ACTIVO
Al igual que sucede con el transporte de carga, el director de la Aeronáutica Civil, Juan Carlos Salazar, dejó claro que “el Gobierno hace un esfuerzo para mantener los aeropuertos abiertos con el propósito de garantizar el abastecimiento de todos los rincones del país y, también, de brindar a los colombianos la posibilidad de acceder a servicios médicos y humanitarios”.
Según la Aerocivil, en un día -en medio de esta coyuntura- están registrándose 94 operaciones aéreas (de las cuales 52 sonde carga) en las que se están moviendo 780 toneladas de mercancías y medicamentos.
A su vez, Julián Laverde, vicepresidente de Operaciones de Red de Avianca, señala que además de coordinar la logística para movilizar carga (por medio de 26 operaciones diarias en las que se mueven más de 1.000 toneladas de bienes entre Colombia y países vecinos), la compañía también ha logrado trasladar a más de 1.000 personas a sus países de origen lo cual ha implicado conseguir los permisos necesarios con los distintos gobiernos.