Un tribunal español ha dictaminado que se realice una autopsia al cuerpo del expresidente de Angola José Eduardo dos Santos, quien murió el viernes en una clínica de Barcelona a la edad de 79 años, dijo el lunes una portavoz del tribunal.
Ella dijo que el tribunal había concedido la solicitud de un miembro de la familia para la autopsia, que aún no se había realizado, pero no proporcionó más detalles.
El bufete de abogados de la familia Carmen Varela que representa a la hija de dos Santos, Tchizé dos Santos, dijo anteriormente que había pedido que el cuerpo de su padre se mantuviera en España para una autopsia completa debido a supuestas «circunstancias sospechosas de su muerte», sin proporcionar pruebas.
Según el despacho del presidente angoleño, João Lourenço, su antecesor, que renunció hace cinco años, falleció en la clínica Teknon de Barcelona, donde estaba siendo atendido tras una prolongada enfermedad. La clínica se negó a comentar sobre la solicitud de una autopsia o los detalles de su muerte.
Había estado recibiendo tratamiento médico desde 2019 y la agencia de noticias portuguesa Lusa informó en junio que estaba en cuidados intensivos en Barcelona, citando a una fuente cercana a él, ya que el gobierno angoleño dijo que el exlíder había sufrido un deterioro de su salud.
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Tchizé y sus abogados también argumentan que el deseo de dos Santos era ser enterrado en Barcelona en lugar de que su cuerpo fuera devuelto a Angola para un funeral de Estado.
A pesar de haber sido elegido personalmente por dos Santos para sucederlo, Lourenço se movió rápidamente para investigar las denuncias de corrupción multimillonaria durante la era del expresidente, que a menudo involucraba a la familia dos Santos.
Dos Santos, quien dijo en una rara entrevista de 2013 que le gustaría ser recordado “como un buen patriota”, nunca respondió específicamente a las acusaciones de que había permitido que la corrupción se volviera rampante.