Según los informes, un hombre armado disparó contra un autobús lleno de fieles judíos que regresaban a casa desde el Muro Occidental de Jerusalén al final del sábado el domingo 15 de agosto.
El sospechoso que huyó de la escena pero luego se entregó a la policía supuestamente hirió a ocho e hirió gravemente a dos, según el Correo.
El EMT senior Nehemia Katz y el paramédico, David Trachtenberg, confirmaron en un comunicado que: “Estuvimos en la escena muy rápidamente”.
“En la calle Ma’ale Hashalom, vimos un autobús de pasajeros parado en medio de la carretera, los transeúntes nos llamaron para tratar a dos hombres de unos 30 años que estaban en el autobús con heridas de bala”.
La organización terrorista Hamas elogió la violencia. No asumieron la responsabilidad del ataque, pero dijeron que fue una respuesta natural a la ocupación de Gaza por parte de Israel.
El Primer Ministro de Israel, Yair Lapid, dijo: “Jerusalén es nuestra ciudad capital y un centro turístico para todas las religiones”.
“Hay una conclusión de este evento, como de los eventos anteriores: quien dañe a los ciudadanos de Israel no tendrá adónde huir”.
Las tensiones suelen ser altas entre Israel y los palestinos que viven en Jerusalén Este, Gaza y Cisjordania.
Gaza está gobernada por el grupo militante palestino Hamas, que ha luchado contra Israel muchas veces. Israel y Egipto controlan estrictamente las fronteras de Gaza para evitar que las armas lleguen a Hamás.