Esta docente de la Normal Superior Juan Ladrilleros en Buenaventura fue reconocida por Computadores para Educar por apropiarse de las TIC para la enseñanza del inglés. Por enseñarlo, según ella misma, «desde la vida diaria, desde la cultura que viven, desde el mundo que habitan y les es cercano”.
La habilidad para el inglés, dice de pronto la profe Mary Lili, es un asunto de familia. Desde que era una niña allá en Yurumanguí, ese apartado corregimiento de aguas cristalinas, distante a 60 kilómetros de Buenaventura, y donde nació hace 38 años, se acostumbró a que en el hogar de los Caicedo Arroyo los once hermanos se saludaran y resolvieran la vida en ese idioma.
Quizás habían seguido los pasos del abuelo Clementino, un veterano trabajador del Ferrocarril del Pacífico que no tuvo más remedio que aprender inglés empíricamente para lograr entenderse con las decenas de ‘gringos’, muchos de ellos marineros y empresarios, que arribaban diariamente en El Puerto persiguiendo negocios y amores.
El Espectador