Con lo justo, pero completo. Otro 1 a 0, como ante Egipto, pero valió la clasificación a octavos de final para Uruguay, por tercer Mundial consecutivo. De propina, volvió al gol Luis Suárez, reafirmando una confianza nunca perdida, pero con algunas sombras después de un pobre debut hace cinco días. Uruguay, sin lucir, está entre los 16 mejores y fiel a su estilo, va a dar pelea. Seguirá siendo el rival incómodo que es preferible evitar.