La agencia de desarrollo de Estados Unidos, USAID, dijo el viernes que le daría a Kenia $ 255 millones en asistencia de emergencia para enfrentar una sequía severa.
Unos 4,1 millones de personas en la nación del este de África se enfrentan a una grave escasez de alimentos, dice el gobierno, mientras que el número de casos de desnutrición infantil ha aumentado a la mitad en partes del país a 942.000 en los últimos tres meses.
El compromiso de financiamiento se suma a los $65 millones que USAID ya había proporcionado este año, dijo la administradora de USAID, Samantha Power.
“Necesitamos que otros países den un paso adelante y se unan a nosotros”, dijo, y advirtió que la crisis alimentaria podría extenderse a otras áreas como la educación, ya que los niños hambrientos no pueden ir a la escuela.
El gobierno ha gastado hasta ahora 12.600 millones de chelines (106,28 millones de dólares) para ayudar a las personas afectadas por la sequía, pero tiene un déficit de más de 15.000 millones de chelines, dijo Margaret Kobia, ministra responsable de programas especiales.
La invasión rusa de Ucrania, que ha afectado la cadena mundial de suministro de alimentos, estaba aumentando el sufrimiento relacionado con la sequía en Kenia y el resto de la región, dijo Power.
Se espera que más de 50 millones de personas enfrenten inseguridad alimentaria aguda este año en Yibuti, Etiopía, Kenia, Somalia, Sudán del Sur, Sudán y Uganda, dijo el viernes el Programa Mundial de Alimentos en una declaración conjunta con otras agencias.
La catástrofe ha sido causada por la escasez de lluvias en la mayor parte de la región y agravada por la crisis en Ucrania, que ha hecho subir los precios del trigo y el maíz.