En el barrio Torices, sector la Unión, la Policía Metropolitana de Cartagena encontró al hombre que el pasado fin de semana fue captado en video en el momento que estafaba a un grupo de turistas y agredía verbalmente al reconocido youtuber y viajero Zach Morris.
En el video se ve el momento en que el joven afro de 28 años de edad y de 1.85 de estatura pretende cobrar 250.000 pesos por 10 cervezas a los turistas, pero no contento con la estafa, exige 120.000 pesos de propina.
“Primo, ¿quieres que te pegue un puñetazo en la cara?”, dice amenazante el estafador al youtuber, que filma la penosa escena.
Morris le responde: “Hermano, soy colombiano y tengo mucho amor por este país y me da lástima que les vayas a pedir tanta plata a estas personas”.
Pero el hombre que, según la Policía, se gana la vida llevando turistas a Playa Blanca y a otros destinos paradisíacos de Cartagena, lo ignora y sigue con la estafa.
“Con el fin de ofrecer tranquilidad a los turistas nacionales y extranjeros, nos dimos a la tarea de hacer una intervención en el sector de Playa Blanca para establecer los hechos en cobros excesivos por parte de una persona dedicada al turismo en esta zona insular”, explica el general Henry Armando Sanabria Cely, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena.
Zach Morris, famoso youtuber estadounidense.
tomado de Instagram: zacmorriss_
Frente a la cámara de Morris, los viajeros desconcertados narran: “No comimos nada y quieren 25.000 pesos por cada cerveza y, además, quieren 120.000 pesos por el servicio”, relata uno de los turistas, bajo uno de los muy conocidos quioscos de Playa Blanca.
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Ante la vergüenza pública por su mal comportamiento, que se hizo viral en las redes sociales, el hombre se había refugiado en casa de sus padres, pero hasta allá llegó la Policía.
“Finalmente esta persona fue ubicada en el barrio Torices, sector la Unión, y entregó su versión de los hechos. La Policía entiende que hubo otra serie de servicios que fueron adquiridos”, agrega el general Cely.
El hombre le dijo a la Policía que en la costosa cuenta también estaban incluidas dos comidas con pargo, como plato fuerte, y que las cervezas las estaba cobrando a 15.000 pesos.
“Se le hizo entender a esta persona que debe mantener la cordura frente a los cobros que se hacen. También se le explicó (…) que no debe amenazar a las personas en vía pública. La estación de Policía tiene la última palabra si se le impone una multa por estos hechos”, concluyó el general Cely.
JOHN MONTAÑO
Redactor de EL TIEMPO
Cartagena
En Twitter: @PilotodeCometas