«La asociación entre China y América Latina es un claro ejemplo de cómo la cooperación internacional puede generar importantes beneficios para todas las partes involucradas», afirmó Fausto Pinato, presidente del Frente Parlamentario Brasil-China del Congreso Nacional brasileño.
BEIJING, 22 jul (Xinhua) — Hace una década, el presidente chino, Xi Jinping, presentó por primera vez la iniciativa de construir una comunidad de futuro compartido China-América Latina en la Reunión de Líderes de China-Países de América Latina y el Caribe en Brasilia, Brasil.
«El hecho de que los líderes de China y de tantos países latinoamericanos y caribeños se reúnan aquí tiene en sí mismo una importancia histórica y mundial», afirmó.
Al recordar el discurso de Xi, Fausto Pinato, presidente del Frente Parlamentario Brasil-China del Congreso Nacional brasileño, dijo que la propuesta de China de construir una comunidad de futuro compartido ha demostrado su importante compromiso con la región, basado en una visión multilateral del mundo.
«La asociación entre China y América Latina es un claro ejemplo de cómo la cooperación internacional puede generar importantes beneficios para todas las partes involucradas», afirmó.
SOCIOS PARA EL DESARROLLO COMÚN
Hace diez años, Xi afirmó que el sueño y la búsqueda compartidos han acercado a China y América Latina. Desde entonces, ambas partes se han ido acercando cada vez más.
Tanto China como los estados latinoamericanos son países en desarrollo y economías emergentes en una etapa importante de desarrollo y revitalización.
China valora sus relaciones con América Latina y siempre ha considerado a los países latinoamericanos como socios importantes en la consolidación de la unidad de los países en desarrollo y la promoción de la cooperación Sur-Sur.
En junio de este año, la presidenta peruana, Dina Boluarte, realizó su primera visita de Estado a China, trayendo una delegación integrada por miembros clave del gabinete y representantes del sector económico.
En una entrevista, habló sobre su visión para el desarrollo del Perú: «un país donde los niños tengan un futuro», «reducir la pobreza», «no más hambre»… Después de visitar Shenzhen, Shanghai, Suzhou y otros lugares de China, obtuvo una experiencia personal de los logros y perspectivas de la modernización china, y también vio esperanza para el futuro de su país.
Durante la última década, China y América Latina han mantenido estrechos intercambios de alto nivel y comunicaciones estratégicas, inyectando un impulso constante a la asociación de cooperación integral China-América Latina caracterizada por la igualdad, el beneficio mutuo y el desarrollo común.
Desde 2023, Xi ha interactuado con los jefes de Estado de Brasil, Venezuela, Chile, Argentina, Colombia, Perú y otros países latinoamericanos, ya sea en reuniones presenciales o a través de cartas, mensajes y conversaciones telefónicas. “Cooperación” y “desarrollo” han sido las palabras más utilizadas en estas ocasiones.
En los últimos años, cinco países latinoamericanos (Panamá, Dominica, El Salvador, Nicaragua y Honduras) han establecido o restablecido relaciones diplomáticas con China. China y un número cada vez mayor de socios latinoamericanos están trabajando juntos para crear un nuevo modelo de relaciones entre China y América Latina caracterizado por la sinceridad y la confianza mutua en política, la cooperación de beneficio mutuo en economía y comercio, el aprendizaje mutuo en los intercambios entre personas, la estrecha coordinación en asuntos internacionales y el fortalecimiento mutuo de la cooperación general y las relaciones bilaterales.
Para Penildon Silva Filho, profesor de la Universidad Federal de Bahía, las intensas visitas de jefes de Estado y altos funcionarios de países latinoamericanos a China confirmaron una vez más la tendencia de «mirar hacia el Este».
«La relación de China con América Latina se inscribe en un nuevo marco, en una nueva situación, en la creación de un mundo multipolar. Asia es hoy el gran motor económico del planeta. Por eso, en ese sentido, se justifica una mayor relación entre los países latinoamericanos y China», afirmó Silva Filho.
LAZOS COMERCIALES EN AUGE
China y América Latina han disfrutado de fuertes complementariedades económicas y comerciales, lo que los convierte en socios comerciales naturales. China ha sido el segundo socio comercial más importante de América Latina desde 2012. El volumen comercial entre China y América Latina el año pasado superó los 489 mil millones de dólares estadounidenses.
En los últimos años, la cooperación económica y comercial entre China y América Latina se ha ampliado desde los campos tradicionales a las nuevas energías, la tecnología digital y el comercio electrónico transfronterizo, entre otros.
China ha firmado acuerdos de libre comercio con Perú, Chile, Costa Rica, Ecuador y Nicaragua. Hasta ahora, el número de socios de libre comercio de China en América Latina es el segundo después de Asia.
Este año, China celebró la quinta ronda de negociaciones del Tratado de Libre Comercio China-Honduras y completó negociaciones sustantivas sobre la actualización del tratado de libre comercio con Perú.
La cooperación financiera entre China y América Latina continúa profundizándose y la internacionalización del renminbi avanza de manera sostenida en América Latina. China ha firmado acuerdos bilaterales de swap de divisas con los bancos centrales de Argentina y Chile.
Los bancos chinos, incluidos el Banco de China y el Banco Industrial y Comercial de China, han abierto sucursales en muchos países latinoamericanos.
Renzo Burotto, historiador de la Universidad de Chile, afirmó que las relaciones económicas y comerciales entre China y América Latina son altamente complementarias.
China es uno de los principales socios comerciales de América Latina, un proveedor de bienes y capitales y un socio estratégico para el desarrollo de industrias como las energías renovables, afirmó Burotto.
LA FRANJA Y LA RUTA
Xi ha subrayado en muchas ocasiones que China está dispuesta a trabajar con América Latina para promover la cooperación de la Franja y la Ruta para promover los lazos bilaterales.
Hasta el momento, 22 países de América Latina y el Caribe han firmado documentos de cooperación de la Franja y la Ruta con China, lo que ha beneficiado a los pueblos de esos países.
Por ejemplo, Botopasi, una aldea remota en el centro de Surinam, solía sufrir frecuentes cortes de electricidad y docenas de aldeas de la región dependían desde hacía mucho tiempo de la generación de energía a base de diésel, con electricidad disponible sólo unas pocas horas al día.
Con la ayuda de los trabajadores chinos, esta situación ha mejorado. Pueblo por pueblo, han construido centrales eléctricas híbridas fotovoltaicas de microrredes para la región, llevando suministro eléctrico las 24 horas a miles de habitantes.
Los proyectos construidos conjuntamente en el marco de la Iniciativa del Cinturón y la Ruta, incluido el proyecto de línea de transmisión de ultra alto voltaje de la central hidroeléctrica de Belo Monte en Brasil, el ferrocarril Belgrano Cargas en Argentina y la carretera Norte-Sur de Jamaica, han beneficiado enormemente a la población local y más allá.
En los últimos años, la cooperación bilateral en la iniciativa del Cinturón y la Ruta se ha vuelto cada vez más ecológica.
En Perú, el principal equipo móvil del proyecto Chancay Harbor, que construyen empresas chinas, funciona con electricidad pura, lo que reduce el consumo en reposo de los equipos relacionados mediante sistemas inteligentes. En Trinidad y Tobago, el polígono industrial Phoenix Park, construido por empresas chinas, se ha convertido en el primer parque industrial de América Latina en estar cubierto por una red 5G y también está equipado con farolas solares, sistemas de tratamiento de aguas residuales de alto nivel y otras instalaciones de protección ambiental.
Fernando Fazzolari, miembro de la Cámara de Producción, Industria y Comercio Argentino-China, dijo que la cooperación de la Franja y la Ruta ha sido popular en América Latina y el Caribe debido a su adhesión al principio de amplia consulta, contribución conjunta y beneficios compartidos y su enfoque en los beneficios mutuos.
«VISITA A FAMILIARES Y AMIGOS»
«Aunque China y América Latina y el Caribe están muy alejados geográficamente, existe un sentimiento natural de afinidad entre nuestros pueblos», dijo el presidente Xi durante su viaje a América Latina hace diez años, describiéndolo como «visitar a familiares y amigos».
En la última década, en el marco del Foro China-América Latina, China y América Latina han construido una red de diálogo y cooperación integral, multinivel y de amplio alcance, y los intercambios entre personas de ambos lados han aumentado.
Desde principios de este año, se ha celebrado con éxito el primer Foro de Cooperación Espacial China-Estados de América Latina y el Caribe, y se ha planificado una nueva serie de proyectos de cooperación agrícola en el Foro de Ministros de Agricultura China-ALC.
Además, China ha añadido o reanudado recientemente varios vuelos directos a países como Brasil, México y Cuba, para facilitar los intercambios de personal.
Raquel León de la Rosa, experta en temas de China por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, México, considera que esto refleja un “mayor dinamismo” en materia de cooperación económica, cultural, política y tecnológica.
“Estos vuelos nos permiten reducir, lo máximo posible, esas distancias geográficas que puedan existir y esto abre un canal de comunicación y conectividad importante”, afirmó De la Rosa.
