Antes de coger ningún otro hábito o rutina, lo primero es que repases los hábitos que no te ayudan a conseguir la imagen ni el bienestar que te has propuesto: comer mal, fumar, beber en exceso, no descansar, no dedicarte tiempo, no ponerte objetivos y metas de belleza… Elige el hábito negativo que más te moleste o que más fácil te resulte eliminar o cambiar y proponte esta semana eliminarlo.
Una buena manera de eliminar un hábito malo es cambiarlo por uno bueno. Acá mencionamos algunos:
¿Sientes que tu mente ya no te propone ningún desafío? ¿Te parece que estás estancado intelectualmente? Pues entonces es momento de modificar tus hábitos de vida diarios, puede que te estés olvidando de darle un poco “trabajo” extra a tu mente.
Es momento de retomar los libros, si has perdido esa costumbre. O de adquirirla. Nada más estimulante que una buena lectura. También una película interesante, un concierto, una charla sobre cuestiones profundas pueden serlo. Darle actividad a tu intelecto despertará tu vida.
Tu cuerpo también necesita de actividad. No lo dejes estancado, dale movimiento y así se moverá tu vida. Sal a caminar, disfruta de los días de sol, haz algún deporte.
Esto también ayudará a sentirte bien. Es que siempre es fundamental recuperar los buenos hábitos, si los has perdido. O sino, es momento de tomarlos como propios para crecer como personas y mejorar aspectos de tu vida.
