Redacción BL
En la sección «Mi ñapa» del noticiero CM&, se toco esta»herida» de las finanzas de Buenaventura, que aún sigue Abierta:
Mi ñapa es el elefante blanco que denunciamos todos los lunes. Hoy, hablamos del caso del proyecto de construcción de un acuaparque en Buenaventura que ocurrió durante el gobierno del exalcalde Bartolo Valencia Ramos en 2015.
El 29 de julio de 2015, le fue entregada la responsabilidad de las obras a Freddy de Jesús Mosquera, representante legal del Consorcio Acuaparque; el proyecto debía estar terminado en seis meses. Han pasado cinco años y del acuaparque no hay ni acua ni parque.
Las obras que se iniciaron hace un lustro están abandonadas. La obra tendría un costo de $ 3900 millones y para financiarlas se utilizarían recursos de las regalías; contaría con piscinas, toboganes y zonas de esparcimiento para niños y adultos. Las irregularidades empezaron cuando al contratista se le entregó un anticipo de más de tres mil seiscientos millones de pesos, es decir, casi el 95 % de los recursos, sin que las obras tuvieran un avance significativo. Inexplicablemente, el contratista argumentó falta de recursos y abandonó el proyecto meses después. Más adelante, 22 familias invadieron terrenos; hoy en día, todavía siguen viviendo allí.
Hoy, el proyecto está abandonado y todo indica que la plata, más de tres mil seiscientos millones de pesos ¡voló, voló y voló!
Ay, mi país. Como todos los lunes: ¡yo quiero a mi país! Pero déjenme llorar un rato.
